Lo que comenzó como una conversación amena sobre su vida, en especial su nueva etapa en pareja, terminó en un momento tenso de dimes y diretes entre la influencer Melissa Klug y la psicoterapeuta Lizbeth Cueva, invitada al magazine “América Hoy”.
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La polémica famosa peruana llegó al set con un traje ajustado que destacó su figura curvilínea a sus 38 años de edad y tener cinco hijos, entre estos la influencer Samahara Lobatón. De inmediato comenzó a hablar de su relación con el futbolista Jesús Barco, con quien incluso tendría planes de casamiento a pesar de ser criticados por la diferencia de edad.
El punto más álgido de la conversación llegó cuando la especialista opinó sobre el romance que ha ocupado los titulares de la farándula. “Yo se lo he dicho a ella, que espere un poquito más, que no tome decisiones en los dos o tres años de relación, comentamos que vaya despacio, con cuidado, con calma, que no se acelera y que todo lo que empieza rápido, termina rápido”.
Melissa Klug escuchaba como quien solo espera su turno para contestar. “Yo no me estoy apurando en nada, estoy viviendo el día a día, lo estoy disfrutando, no me estoy apurando, es más, no me he casado todavía, estoy esperando”. La psicóloga agregó. “Esa es la recomendación, esperar y conocerse es muy importante”.
La influencer estuvo cara a cara con la psicoterapeuta de América Hoy, quien cuestionó los planes de maternidad, luego de tener cinco hijos. “Acá no se trata de que Dios quiera, acá se trata de que los dos decidan, es una decisión, Dios va a bendecir esa unión, por supuesto que sí pero no es que ´vamos a ver´porque sino estamos delegando la decisión a la situación. El tema de casarse es una decisión de los dos”.
La experta lanzó dardos a la controversial Klug quien no descartó convertirse en madre por sexta vez y darle una hijo al su actual pareja. “Yo a Melissa la veo buena onda, muy mamá, me parece muy admirable, pero también es un consejo, una recomendación, me gustaría que Melissa pudiera tener un compañero de vida pero ya no tener más hijitos y dedicarte a etapa de vida”.
Klug no se quedó callada y respondió de inmediato con rostro de malestar: “Como me dices, es la decisión de uno toma; si yo decido, es mi cuerp. Si yo deseo tener otro bebé, es mi decisión y yo sabré, cada uno decide libremente”. La experta, constantemente interrumpida, aclaró que no fue una prohibición sino un consejo para que disfrute su vida más enfocada en ella y en su relación.
