Según la plataforma de monitorización y análisis de redes sociales Brandwatch, a finales de 2016 que ‘Facebook’ tiene 1.71 mil millones de usuarios y 1.4 mil millones comparte 4501 fotos por segundo, es decir 350 millones de imágenes diarias. Por otro lado, ‘Instagram’ cuenta con 400 millones de usuarios registrados y suben 810 fotos por segundo siendo en total 70 millones al día. No obstante, de los 300 millones de usuarios de ‘Linkedin’, más de un millón comparte contenido diario (entre ellos fotos) y para no quedarse atrás, en ‘Whatsapp’ se comparten 4500 millones de fotografías diarias; en pocas palabras las redes sociales y laborales están ganando protagonismo en la sociedad.
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La importancia de una buena foto
En ese sentido, el fotógrafo y realizador audiovisual Mario Colán indicó que ‘los encargados de recursos humanos de las empresas se encuentran a la caza en las redes sociales para captar empleados y empleadas y entrevistarles. Es ahí, cada vez más, donde centran su atención para buscar personal capacitado, sin embargo, en esta primera instancia un excelente curriculum no es necesariamente suficiente. Existe un paso casi inconsciente pero fundamental de rigor en el ‘detalle’, es decir; si un empleador ve que su potencial entrevistado presenta en su cuenta de Linkedin un resumen de su experiencia profesional y pero su foto de perfil es una cortada de otra grupal, familiar o una foto carnet, es posible que perciba esto como un rasgo de descuido, pudiendo llevarlo a una posible falsa percepción de informalidad, irresponsabilidad o falta de cuidado en los detalles‘. Hoy en día la fotografía es lo que suele encabezar los perfiles virtuales laborales y sociales. En medio de una sociedad gobernada por la imagen, una ‘buena’ o ‘mala’ presentación arranca por ese lado, en el ‘cómo’ está tomada la fotografía (refiriéndonos al cuidado), logrando volver el primer escollo para alcanzar una entrevista de trabajo.
‘Podemos tener el mejor CV con una experiencia increíble y estudios en universidades renombradas que valen nuestra contratación en esa empresa a la cual aspiramos, sin embargo debemos recordar que una fotografía, para muchos, no solo es la representación de nuestra imagen, sino también una evidencia del cuidado que le ponemos a las cosas que hacemos relacionadas con nuestro trabajo. Una fotografía bien tomada se volverá el complemento perfecto de la experiencia que te avala y más allá de mostrar que eres una persona impecable, probarás que te preocupas por el más mínimo detalle, logrando dejar una increible primera impresión’.
La fotografía perfecta en 3 simples pasos
No es un secreto saber que la toma perfecta lleva ciertos elementos que deben armonizar entre sí para lograr su cometido, sin embargo es inevitable que al estar en una sesión la persona que está siendo fotografiada pueda sentir incomodidad. Es por ello que el fotógrafo y realizador audiovisual brinda pautas claves para superar ese momento.
– El primer paso es establecer un vínculo entre el fotógrafo/a y el/la retratado/a por si este/a último/a es tímido/a o nervioso/a, por ello recomiendo que se busque a alguien recomendado por un amigo o conocido de confianza, además tener una charla con el fotógrafo/a, algún tipo de intercambio vía chat o teléfono o sino, visitar su estudio. La conexión entre las partes es importante porque cualquier tipo de tensión o relax queda reflejada en la imagen. Un buen fotógrafo o fotógrafa debe de ser capaz de brindar comodidad a su sujeto para lograr que supere cualquier tipo de bloqueo’.
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– El segundo paso y uno de los más importantes es el cuidado de la imagen personal, ‘si contrataste a un fotógrafo para hacerte las fotografías asegúrate contar con dos o tres mudas de ropa para refrescar la actitud, cambiar el color, dar una u otra imagen, etc. Asimismo es indispensable que, las mujeres, se preocupen por su maquillaje y peinado o que acuerden con el fotógrafo contratar para la sesión un o una profesional del rubro. En el caso de los varones es importante que sean cuidadoso con el cabello, la barba y el bigote, si lo tuvieran.
– Para finalizar, y si ya tienes algunas sesiones a cuestas, es que puedas reconocer tus mejores ángulos y posturas con las que te puedas sentir más cómodo. Con estos tres pasos sencillos, podrás obtener una fotografía perfecta y mejores oportunidades laborales.
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