Su órgano sexual: Si tu pareja no es un súper dotado jamás hagas algún tipo de comentario ni tampoco bromas. Corres el riesgo de bajarle la autoestima y poner en peligro la relación no sólo porque lo inhibirás, si no por algo más grave: lo hieres.
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Su equipo de fútbol: Si es un fanático, ve todos los partido, va al estadio y sigue todas las noticias del club de sus amores, si lo criticas sólo lograrás ponerlo de mal humor y sacar una pelea gratuita. Trata de tonarte las cosas con humor y piensa en tus propias pasiones y hazlas.
Su mamá: Acá entras en un campo minado. El hombre jamás se dará cuenta si tu suegra te habló con sarcasmo o te ninguneó veladamente. Menos va admitir que interfiere en los asuntos de pareja: ellos lo justifican con que su madre siempre ‘quiere ayudar’. Trata de llevarte lo mejor posible y evita ponerlo en el dilema de que tenga que elegir entre ella o tú porque vas a salir perdiendo.
Su auto: Aunque tú no lo entiendes, para ellos el auto es una verdadera extensión de su cuerpo. Es por eso que le dedica todo el tiempo del mundo a lavarlo, arreglarlo y probarlo. Si decides ir en contra de ese amor, de seguro saldrás trasquilada.
Sus amigos: Quizás te caen pésimo por múltiples razones, pero para él son como sus hermanos y cómplices con lo que no se cansan de contar y reírse una y otra vez de las mismas anécdotas. Aunque los critiques, siempre va a encontrar una buena excusa para justificarlos. Al igual que con la suegra, trata de llevar la fiesta en paz, siempre habrá una forma de hacerlo.
Vía Publimetro Chile
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