Hace unos pocos años solo bastaba una licenciatura en una universidad para ingresar a una empresa y destacar en la oferta de posibles empleados. Hoy, la competencia en el mercado laboral es bastante más agresiva.
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Para que un profesional se diferencie de otros y tenga el puesto que busca, es necesario que haya llevado un grado académico de posgrado, como la maestría.
‘Es a partir de las maestrías que se van generando nuevos enfoques y conocimientos, desde la propia investigación, por lo que los posgrados suelen ser los ‘faros-guía’ de los pregrados’, explica Marco Núñez, director de la Escuela de Posgrado de la Universidad de Lima.
Esto coincide con la opinión de Liliana Alvarado, directora de Posgrado de la Universidad Tecnológica del Perú (UTP), ya que para ella ‘las carreras de pregrado, en su mayoría, son teóricas, mientras las maestrías son estudios más práctico, donde se aprende haciendo’.
Incluso, debido a las exigencias del mercado laboral, las maestrías de hoy son bastante específicas.
‘La maestría es altamente recomendable para todas las carreras, incluso las artísticas, porque el mercado requiere de empleos específicos. Por ejemplo, hace unos años existía la Maestría en Tecnología de la Información. Ahora, esa maestría está dividida en Social Media, Seguridad Informática, Business Analytics y otras más’, cuenta Guillermo Quiroga, director de Posgrado de la Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas (UPC).
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La maestría más estudiada y más conocida a nivel internacional y local es la de Administración de Negocios (MBA, por sus siglas en inglés).
‘Estamos en un mundo en el que las empresas llevan la pauta de la economía y un MBA es como la llave si uno quiere un cargo gerencial. Antes, el MBA era un estudio opcional, hoy es una necesidad’, agrega Quiroga.
Pero, así como hoy el MBA es un estudio vital, mañana ya no podría serlo. ‘Siempre habrá necesidad de crear nuevas maestrías y de cerrar otras. Todo va a depender de las demandas sociales y del mercado, que están en constante cambio’, explica Núñez.
