1.Bullying físico: Es el tipo de acoso más común, especialmente, entre los chicos en edad escolar. Este implica golpes, empujones e incluso palizas por parte de uno o más agresores, contra una sola víctima. En algunos casos, también se producen robos o daños intencionados contra las pertenecías del acosado.
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2.Bullying psicológico: En estos casos, existe una persecución, intimidación, tiranía, manipulación, e incluso, constantes amenazas hacia la víctima. Como resultado, se daña la autoestima de quien está siendo acosado, fomentando sensaciones de temor y pánico, que son difíciles de detectar por parte de los padres o maestros.
3.Bullying verbal: Estas acciones no corporales son realizadas con el fin de discriminar, difundir chismes o rumores, y hacer bromas insultantes mediante el uso de apodos peyorativos. Es más común encontrarlo en grupos de chicas jóvenes, quienes a medida que se van acercando a la adolescencia, discriminan a quienes parecen diferentes.
4.Bullying sexual: Se presenta cuando existe un asedio, inducción o abuso sexual. También puede implicar constantes referencias malintencionadas a las partes íntimas de la víctima. Asimismo, la homofobia, también puede ser considerada en esta categoría, ya que conlleva a molestar a alguien debido a su orientación sexual.
5.Bullying social: Pretende aislar a un individuo del resto del grupo, excluyéndolo e ignorándolo, malintencionadamente. Este tipo de bullying puede ser directo, al excluir a la víctima sin dejarla participar de ninguna actividad recreacional. O indirecto, al ignorar la existencia de la víctima al propósito, y tratarla como a un objeto.
6.Bullying cibernético: Con la penetración de las nuevas tecnologías, la existencia de este tipo de actos, que implican acosar a otras personas cibernéticamente, son cada vez más frecuentes. Se generan actos de humillación a través de canales variados, como pueden ser las redes sociales, páginas webs o blogs, y servicios de mensajería.