PUBLICIDAD
1.Pensar en imágenes: ¿Alguna vez intentaste recordar algo a través de su visualización? Las complejas fórmulas matemáticas pueden ser muy difíciles de interiorizar, por lo que en vez de memorizarlas, puedes imaginarlas como los dibujos de una gráfica.
2.Metáforas y analogías: Cuando aprendas algo nuevo, procura relacionarlo a un concepto cotidiano mediante el uso de metáforas. Esto te ayudará a entender, incluso, los conceptos más abstractos, ya que podrás recordarlos en función a eventos comunes y corrientes.
3.Fijaciones: Esta táctica es utilizada para memorizar secuencias de números complejos, por lo que incluso, tiende a ser utilizada por magos e ilusionistas. La idea principal de realizar una fijación reside en adjuntar dígitos a consonantes específicas. Por ejemplo, 1=A.
PUBLICIDAD
4.Utilizar diagramas: Recientes estudios han probado que realizar dibujos colabora con una mayor concentración. Si te encuentras en una clase, con dificultades para concentrarte y ordenarte, puedes optar por dibujar tus apuntes en cuadros y diagramas.
5.Enseña a alguien más: Si puedes explicarle a alguno de tus compañeros lo aprendido en la clase, tu cerebro generará nuevas conexiones que mejorarán tu aprendizaje de dicha materia. Además, esto te ayudará a practicar, memorizar e interiorizar diversos conceptos.
6.Evita tomar apuntes rígidos: Cuando tomes apuntes en una clase, trata de que sean interesantes. Incluso, puedes escribir las propias ideas que los diversos conceptos aprendidos te generan, para poder interiorizarlas, y entender a cabalidad la materia en cuestión.
7.Refuerza la base: ¿Has notado que conforme avanzas en una materia, los temas que antes se te dificultaban, se vuelven fáciles? Por ello, refuerza dichos temas básicos y generales con mucha disciplina, para que te sea más fácil entender los que vendrán a continuación.
8.Aprendizaje visceral: En esta táctica, a diferencia de la visualización, el aprendizaje es interiorizado a través de una combinación entre sentimientos, texturas, imágenes y sonidos. Básicamente, se tiene que abstraer un concepto a través de la imaginación, para relacionarlo y recordarlo.