Por: Elisabeth Braw
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Por generaciones, los mexicanos han disfrutado de las ‘aguas frescas’, una bebida saludable para saciar la sed.
Ahora, son quienes tienen el mayor consumo de gaseosa per cápita del mundo. Y los efectos se están evidenciando en las estadísticas: hoy en día, el 33% de los mexicanos son obesos, lo que los hace ligeramente más gordos que los estadounidenses (32%), según las últimas cifras de las Naciones Unidas (sin embargo, otras estadísticas le dan a EE.UU. una tasa del 36%).
‘Los paladares de las personas han sido secuestrados’, dice Xaviera Cabada, coordinadora de salud nutricional de la Organización Mexicana de Nutrición. ‘La gente se ha acostumbrado tanto a comer con sal y grasa en exceso por la comida chatarra, que sus platos caseros los suelen cocinar con más aderezos de lo normal’.
Los mexicanos que tienen sobrepeso no suelen pertenecer a la clase alta. Por el contrario, ganan poco dinero. ‘Desde hace diez años las multinacionales han cubierto a México con comida altamente procesada’, explica Cabada. ‘Es más barata, está disponible y es adictiva’.
En todo el mundo, los pobres se están volviendo gordos. Los mexicanos ya no consumen dietas a base de frutas, vegetales y cereales, ya que les resulta más económico gastar en comida chatarra. Según la Organización Mundial de la Salud, la obesidad es aún menos común en las comunidades de bajos ingresos, pero ser pobre ya no es garantía de ser delgado.
‘La obesidad es un problema de tiempo completo’, afirma Hank Cardello, director de la Iniciativa para las Soluciones de Obesidad del Instituto Hudson en Washington D.C. y autor del libro Lleno: Una mirada hacia quienes (realmente) están volviendo gordos a los estadounidenses. ‘Solamente en Estados Unidos, el negocio de comida chatarra es de US$200 mil millones al año. El costo personal es que la obesidad es un puente para muchas enfermedades, como la diabetes. Uno de los mayores enemigos para comer bien es que las personas no tienen tiempo para cocinar’, comenta Cardello.
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En el 2011, 81 mil mexicanos perdieron sus vidas a causa de la diabetes.
Actualmente, la tendencia hacia la obesidad es mucho mayor en las economías en vías de desarrollo, en especial en Latinoamérica. Perú, por ejemplo, tiene más restaurantes de comidas rápidas per cápita que cualquier otro país. En Guatemala, la mitad de los niños sufre de anemia y retraso en el crecimiento, mientras que el 50% de las mujeres tiene sobrepeso o son obesas.
La solución, sostiene Cardello, es mostrar a los gigantes de la comida que deben reducir las calorías en sus productos. ‘La respuesta no es sacar del comercio los productos malos, sino introducir mejores’, agrega.
Los sitios fast food que ofrecen opciones saludables1. Las ensaladas de KFC. La cadena KFC ofrece en su menú dos opciones de ensaladas. La ensalada césar y la del huerto.2. Las ‘veggies’ de Bembos. Las hamburguesas de soya son las nuevas protagonistas en Bembos. El Perú tienen el récord de restaurantes de comida rápida per cápita. 3. Los McWraps de McDonalds. Estas nuevas tortillas de McDonalds contienen lechuga, tomate y pollo. También, hay la opción ‘veggie’.
