En el pasado mes de marzo, una casa en Naples, Florida, sufrió algunos destrozos luego de que le cayera desde el cielo un objeto que hasta los momentos, su procedencia era una gran duda y fue el causante de un sinfín de especulaciones y teorías.
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Con el pasar de los día la NASA confirmó que el objeto cayó desde el espacio, sin embargo, no especificó de dónde provino. Todo quedó aclarado al notificarse en las últimas horas que el altercado se generó mediante un desprendimiento de la Estación Internacional. En pocas palabras, se trató de una simple “basura espacial”.
Alejandro Otero, un residente de la ciudad de Naples, relató a medios locales que el pasado 8 de marzo 2024 un objeto metálico había impactado en su casa, atravesando el techo y ambos pisos.
— TIO OVNI CHILE (@OvniChile1) April 17, 2024
La NASA indicó que el objeto era parte de la Estación Espacial Internacional! 😱🚀 pic.twitter.com/MCBlAlGMIS
Detalles de la investigación
La agencia espacial de los Estados Unidos explicó que el desprendimiento se originó en la Estación Espacial Internacional (EEI) hace tres años. Dicho sitio es un laboratorio de investigación que orbita a unos 400 kilómetros de distancia respecto a la Tierra y además de la NASA, el lugar sirve para funciones de la ESA (Europa), Roscosmos (Rusia), JAXA (Japón) y la CSA (Canadá).
En concreto, el objeto formó parte de un equipo que se utilizó para montar baterías en una plataforma de carga, que el brazo robótico de la EEI dejó caer el 11 de marzo de 2021. Se esperaba que esa pieza flote entre dos y cuatro años, para luego desplomarse y quemarse en su paso por la atmósfera, sin embargo, este impactó en una casa, atravesando el techo y rompiendo el suelo al impactar. Por suerte, no hubo víctimas fatales ni heridos que lamentar.
“Debido a la velocidad y el volumen de desechos en la órbita terrestre baja, los servicios, exploraciones y operaciones espaciales actuales y futuros plantean un riesgo de seguridad para las personas y las propiedades en el espacio y en la Tierra”, expresaron desde la NASA. El objeto pesó poco menos de 1 kilogramo y contó con una altura de unos 10 centímetros.