El presidente Joe Biden nuevamente ha tropezado al subir las escaleras para abordar el Air Force One, lo que ha generado preocupaciones sobre su estado de salud y si está en condiciones de enfrentar otra campaña presidencial. A pesar de utilizar una escalera más corta y menos desafiante, el mandatario de 80 años tuvo dificultades mientras ascendía los 14 peldaños conectados al avión presidencial en Helsinki, Finlandia.
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Este no es el primer tropezón de Biden al abordar el Air Force One. En un incidente anterior en la Academia de la Fuerza Aérea en Colorado, el presidente sufrió una dura caída al tropezar con una bolsa de arena durante una ceremonia de graduación. Desde entonces, se le ha visto utilizando la escalera más corta para evitar situaciones similares.
Biden vuelve a tropezarse al subir las escaleras y la polémica se enciende nuevamente
Aunque la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, afirmó que no estaba al tanto de ninguna decisión sobre qué escalera utilizaría el presidente, este último incidente plantea interrogantes sobre si se están tomando las precauciones adecuadas para garantizar su seguridad al abordar la aeronave presidencial.
El informe médico emitido por el doctor de la Casa Blanca, Kevin O’Connor, después del examen físico anual del presidente, reveló que Biden padece de una “artritis espinal significativa, artritis leve en el pie después de una fractura y neuropatía periférica sensorial leve en los pies”.
Estas condiciones podrían afectar su equilibrio y movilidad, lo que explicaría sus dificultades al subir las escaleras, por lo que, este último episodio plantea serias preocupaciones sobre la aptitud del presidente Biden para asumir otra campaña presidencial.
Biden podría vérselas difícil en la próxima campaña
A pesar de su experiencia política y su trayectoria en el servicio público, su edad y los problemas de salud subyacentes podrían afectar su capacidad para desempeñar plenamente las funciones del cargo. Además de los problemas físicos evidentes, también ha habido preocupaciones sobre la capacidad del presidente para mantener el enfoque y evitar comentarios y errores embarazosos durante sus apariciones públicas.
Durante su reciente visita a Europa, Biden cometió varios deslices, como referirse erróneamente a la primera ministra de Islandia como “hija de Irlanda” y llamar “Vladimir” al presidente de Ucrania, causando que los cuestionamientos sobre su salud y capacidad para asumir otra campaña presidencial se intensifiquen.
