MADRID, 24 (EUROPA PRESS)
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La admiración se ha podido ver en los ojos de los jóvenes presentes en la noche de este viernes en un WiZink Center de Madrid extasiado con el trap y reggaeton argentino que triunfa y cruza fronteras. Duki, el máximo exponente del mismo, ha sido el que ha firmado el reinado de la escena musical de su país en España, poniendo a 13.000 personas en 'modo diablo', lo que viene a ser, en la jerga del protagonista, la locura.
Se preveía que 'el Duko' triunfase, como ha hecho, esta noche. Se trata de la primera en el antiguo Palacio de los Deportes, que volverá a llenar este sábado en el marco de la gira 'Desde el fin del mundo'. Sus citas en este emblemático estadio confirmarán, junto a dos Palau Sant Jordi, en Barcelona, la fuerza en la música internacional de este joven de 26 años que empezó su carrera participando en 'El Quinto Escalón', una competición de freestyle que tuvo sus inicios en las escaleras de un parque de Buenos Aires para después convertirse en la cuna de varios de los artistas urbanos que marcan la escena musical argentina.
Mauro Ezequiel Lombardo Quiroga, el nombre real del rapero, ganó esta competición en 2016, lo que le dio la oportunidad de sacar su primer sencillo, dando los primeros pasos de una carrera de momento imparable que ha batido récords como llenar cuatro veces el estadio Vélez de Buenos Aires. Con 180.000 entradas vendidas en horas, se convirtió en el artista argentino más rápido en agotarlas.
Por eso, quizá para Duki esta noche sea una de tantas, pero no para su público, que empieza a desesperarse ante la salida de su ídolo. A las 21.20 horas, con su característico 'outfit', pantalón corto, camiseta y chaleco, el argentino asalta el escenario a ritmo de uno de sus últimos éxitos, 'Givenchy'. Comienza así una cita marcada por las rimas y una voz grave, carraspeante, adornada con 'autotune'.
"¿Cómo está mi gente en Madrid esta noche? Gracias por estar acá", dice Duki tras algunas canciones. No se cansará de agradecer a sus seguidores por ayudarle a "cumplir sueños".
En un escenario envuelto con tres pantallas gigantes que muestran la imagen del artista en directo, el astro de la noche sigue su particular "fiesta" con temas como 'Si te sentís sola', 'Sudor y trabajo' o 'Volando bajito', entre otros.
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Tras ellas, llega una de las más aplaudidas de la noche, 'Hablamos mañana', tema que comparte con el puertorriqueño Bad Bunny. El público corea entusiasmado por un espectáculo de letras rápidas que acaba con Duko haciendo corazoncitos y golpeándose el pecho, emocionado y agradecido.
Sigue con 'Vuelta a la luna' y 'Sigo fresh', que, como las anteriores, canta sobre las tablas sin equipo de baile ni músicos en directo. Pero esto cambia con 'Unfollow', que rima arropado por un batería. Los instrumentos empiezan a acompañar al ordenador, pues luego subirán guitarristas.
Duki se muestra seguro sobre el escenario, que recorre de un lado al otro con su rostro tatuado bañado en sudor, mientras el público se entrega a su show, por el momento centrado en el trap con temas como 'Otro level', 'Bottas' o 'Santo grial', que canta junto al primer invitado de la noche, el rapero Dano.
Llega entonces la 'temporada de reggaeton' y el público sube el volumen porque suenan los temas más conocidos del argentino, al menos en España, muchos de ellos impulsados por plataformas como TikTok.
'SI QUIEREN FRONTEAR', CON QUEVEDO
'Top 5' enloquece, pero se queda corta ante 'Si quieren frontear', pues sale el español Quevedo. Ambos tienen en común haber triunfado en lo urbano fuera de sus países, colándose en los primeros puestos que antes, por lo general, solo ocupaban los puertorriqueños y colombianos. También comparten las críticas. Al igual que el canario en España, el argentino ha sido cuestionado en su país por el uso del 'autotune'.
Quevedo recuerda que Duki le apoyó "desde el principio". "Le debo todo", subraya antes de marcharse, dejando al protagonista introducir 'Marisola', uno de sus últimos éxitos. La canción, que triunfa en las plataformas, es un remix con el chileno Cris MJ y Nicki Nicole, artista argentina que forma parte de esa nueva escena musical que marca las reglas. Argentina y Chile, "en la casa", esta vez en España.
Entre otras, continúa con la aplaudida 'Sin frenos' o 'Ticket', que se demora por problemas técnicos. "Estoy vendiendo todos los tickets (...) ¿Cómo quieren que no brille", canta Duki en esta canción. En el WiZink, el argentino brilla para un público que disfruta sin importarle que el espectáculo no cumpla con los requisitos instrumentales y vocales de antaño. Casi todos son jóvenes, y muchos menores.
SESIÓN CON BIZARRAP
Uno de los momentos principales de la noche llega con la 'Bzrp Music Sessions, Vol. 50'. Como el título indica, la firma con el productor argentino. Esta sesión fue una de las más esperadas y se hizo de rogar. En la cita, Duki la inicia a capela. La siente. En ella cuenta su historia, cómo ha llegado a dónde está y lo que cuesta estar en esa cima. Pese a la rapidez que se requiere, el público corea. "Un abrazo grande para Bizarrap", clama Duki al acabar.
Ya en la recta final, dedica "a los pibes del fondo", los de las gradas y últimas filas de la pista, 'Hello cotto', que canta entre fuego en el escenario. Sigue con el desamor de 'Además de mí', que despide saludando a 'Los del espacio', una frase utilizada por María Becerra, Lit Killah, Rusherking, Tiago PZK y FMK para identificarse en sus canciones como parte de un grupo. Todos ellos forman parte también de la arrolladora ola musical argentina.
'Goteo', 'Malbec' y 'She don't give a fo' marcan el final de la noche. Todas ellas son clásicos de Duki que el público se sabe de principio a final.
"Si no fuera por ustedes no estaría acá. Gracias por el amor. Es una noche que voy recordar el resto de mi vida", se despide Duki, quien se ve "igual" que su público. "Soy su hermano, su primo, su amigo", asegura, para animar a los 'pibes' que hoy le escuchan a "tener sueños" y luchar por ellos. Tras este emotivo discurso cierra el círculo y la noche con 'Givenchy'.
Este sábado otras cerca de 13.000 personas disfrutarán del espectáculo de Duki, que actuará también el 3 y 4 de marzo en el Palau Sant Jordi de Barcelona, sumando así cuatro fechas en las que congregará a unas 35.000 personas. El artista volverá en verano a nuestro país para participar en varios festivales y, posiblemente, lo haga ya con varias canciones nuevas bajo el brazo, pues este 2023 se espera su nuevo álbum, un trabajo deseado en el que volverá al trap. "Temporada diablo is coming", avanza antes de bajarse de las tablas del WiZink.
