Cientos de personas disfrazadas de Santa Claus esquiaron por una montaña en Maine como parte de un evento caritativo.
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Unos 300 Santa Clauses, todos vestidos de rojo, con su capucha y su barba blanca, esquiaron por una montaña en el Sunday River ski resort en Newry, Maine.
Entre ellos también hubo un Grinch y un árbol de Navidad esquiador.
En realidad no había nevado en la zona pero la localidad usó una máquina de nieve, para la tradición anual llamada “Santa Sunday”. Este año el evento recaudó 7.500 dólares para una organización caritativa local.