MADRID, 4 (EUROPA PRESS)
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"Solo podrá permanecer en nuestras aguas territoriales el tiempo necesario para que podamos ver si hay alguna emergencia de salud o de otra naturaleza a bordo", ha explicado el ministro del Interior, Matteo Piantedosi, en rueda de prensa, según ha recogido la agencia de noticias AdnKronos.
El barco, llamado Humanity 1, que tiene bandera alemana, se dirige ya hacia el puerto siciliano de Catania. "Hemos adoptado un decreto interministerial de conformidad con el artículo 1, párrafo 2, del decreto ley 130 de 2020", ha dicho.
El titular del Interior también ha informado de que otro barco más pequeño, con 94 personas a bordo, se dirige hacia Siracusa. "Nos informaron de que hubo un intento de revuelta a bordo, con precarias condiciones de navegación, por lo que se dirige hacia Siracusa", ha explicado.
Estas declaraciones se producen después de que el propio Piantedosi expresara su negativa a permitir la entrada de migrantes rescatados por buques de varias ONG en el Mediterráneo y pidiera que sean precisamente los países de origen de estos barcos los que acojan a los migrantes.
El endurecimiento de las políticas migratorias por parte del nuevo Gobierno de Italia, encabezado por la ultraderechista Giorgia Meloni, ha provocado que unos 1.000 migrantes estén a la espera de desembarcar en algún puerto seguro. Roma ha apelado a la responsabilidad de los países a los que legalmente pertenecen los barcos.
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La incertidumbre de estos últimos días llevó a SOS Mediterranée a pedir ayuda a Francia, España y Grecia, para que alguno de estos países respondiese, ya que 234 migrantes rescatados en el Mediterráneo que se encuentran a bordo del buque de rescate 'Ocean Viking' esperan todavía puerto seguro.
"Las provisiones se están acabando", alertó la organización, que previamente había contactado sin éxito con Italia y con Malta. "Se esperan fuertes vientos y olas altas para finales de esta semana", señaló en otro comunicado la ONG.
Otra embarcación, el 'Geo Barents', de Médicos sin Fronteras, pide puerto seguro "inmediatamente" para los 572 migrantes rescatados en el Mediterréneo. "Las organizaciones humanitarias están trabajando en el mar porque no existe un sistema establecido eficaz de búsqueda y rescate por parte de Europa", ha explicado una trabajadora desde el barco, Anabel Montes.
Desde principios de 2022, unas 1.700 personas han desparecido en el Mediterráneo, 1.287 de ellas en la zona central, que es ya la ruta migratoria más peligras del mundo, según datos de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
Datos del Gobierno italiano indican que casi 86.000 personas llegaron por mar a Italia entre enero y noviembre de 2022, de los cuales la mitad son de Túnez, Egipto y Bangladesh. En el mismo periodo de 2021, la cifra se encontraba en torno a los 53.000, mientras que en 2020 eran 28.300.
