SEÚL, Corea del Sur (AP) — Las sirenas antiaéreas se activaron en una isla de Corea del Sur el miércoles y la población fue evacuada a refugios subterráneos luego de que Corea del Norte lanzó al menos 17 misiles, incluyendo uno en su dirección que cayó en la tensa frontera marítima entre las dos rivales. Seúl respondió de inmediato lanzando sus propios misiles a la misma zona.
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Los incidentes se produjeron horas después de que Pyongyang amenazó con emplear armas nucleares para que Estados Unidos y Corea del Sur “paguen el precio más horrible de la historia” en protesta por unas maniobras militares conjuntas en curso que el Norte considera una ensayo de invasión. La Casa Blanca mantiene que Washington no tiene ninguna intención hostil hacia la nación y prometió trabajar con sus aliados para frenar las ambiciones nucleares del hermético país.
El lanzamiento de los proyectiles norcoreanos coincidió con un momento en el que la atención global está puesta sobre el Sur luego de que una avalancha durante una celebración de Halloween dejó más de 150 muertos en Seúl durante el fin de semana, la peor tragedia del país en años.
Según el ejército surcoreano, el Norte lanzó al menos 17 misiles — todos balísticos de corto alcance o supuestos misiles tierra-aire — desde sus costas oriental y occidental el miércoles en la mañana. Más tarde, disparó alrededor de 100 proyectiles de artillería hacia la zona de separación marítima oriental creada por ambas naciones en 2018 para reducir las tensiones, agregó.
La cifra de proyectiles, 17, es un récord en las pruebas armamentísticas diarias norcoreanas en los últimos años.
Uno de los misiles balísticos voló hacia la isla surcoreana de Ulleung antes de aterrizar a 167 kilómetros (104 millas) al noroeste. El ejército activó después una alerta por ataque aéreo para el territorio, indicó el Estado Mayor Conjunto. Los medios surcoreanos publicaron imágenes que mostraron a los residentes trasladándose a los refugios subterráneos.
La alerta se desactivó horas más tarde.
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El misil cayó a 26 kilómetros (16 millas) de la frontera marítima entre los países, en aguas internacionales frente a la costa este del Sur. De acuerdo con el ejército surcoreano, es la primera vez que un proyectil de Pyongyang se acerca tanto a su frontera marítima desde su separación en 1948.
“Esto no tiene precedentes y nunca lo toleraremos”, dijo el Estado Mayor Conjunto surcoreano en un comunicado.
Más tarde el miércoles, aviones de combate del Sur lanzaron tres misiles guiados de precisión aire-tierra cerca de la frontera marítima oriental. Según el ejército surcoreano, cayeron en aguas internacionales a la misma distancia de 26 kms al norte de la línea fronteriza.
Las hostilidades en la península coreana se han disparado en los últimos meses, con las pruebas de misiles norcoreanos con capacidad nuclear y la aprobación de una ley por parte de Pyongyang que autoriza el uso preventivo de sus armas nucleares en una amplia gama de situaciones. Algunos expertos siguen dudando de que el Norte vaya a ser el primero en emplear armas nucleares contra las fuerzas de Washington y Seúl.
En un comunicado a primera hora del miércoles, Pak Jong Chon, secretario del gobernante Partido de los Trabajadores norcoreano y considerado un confidente cercano del líder Kim Jong Un, calificó de “agresivas y provocadoras” las maniobras aéreas “Tormenta Vigilante” en las que participaron unos 240 aviones de guerra de los dos países.
“Si Estados Unidos y Corea del Sur intentan utilizar sus fuerzas armadas contra (Corea del Norte) sin ningún temor, los medios especiales de las fuerzas armadas (del Norte) llevarán a cabo su misión estratégica sin demora”, dijo Pak, en una aparente referencia a su arsenal nuclear.
“Estados Unidos y Corea del Sur tendrán que enfrentarse a un caso terrible y pagar el precio más horrible de la historia”, indició.
Las autoridades estadounidenses y surcoreanas han reiterado que sus ejercicios tienen naturaleza defensiva y no buscan atacar al Norte.