LONDRES (AP) — BP reportó el martes más del doble de beneficios en el tercer trimestre que el año anterior, ya que la gigante energética con sede en Londres se benefició de los altos precios del gas natural y el petróleo tras la invasión rusa en Ucrania.
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El beneficio subyacente ajustado a costes de reemplazo, que excluye partidas puntuales y fluctuaciones en el valor de los inventarios, se disparó a 8.150 millones de dólares, en comparación con 3.320 millones de dólares en el mismo periodo del año pasado, dijo BP el martes. La compañía también anunció planes de recompensar a los accionistas y recomprar otros 2.500 millones de dólares en acciones.
Las grandes ganancias de las energéticas británicas impulsan el debate sobre que el gobierno expanda un impuesto a esos beneficios adicionales, mientras el primer ministro, Rishi Sunak, trata de cuadrar un agujero de 40.000 millones de libras (46.000 millones de dólares) en el presupuesto. La rival de BP Shell anunció la semana pasada unas ganancias del tercer trimestre de 9.450 millones de dólares, más del doble que el año anterior.
También el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha planteado la posibilidad de gravar esos beneficios adicionales provocados por la coyuntura internacional si las empresas no aumentan la producción interna, y el lunes las acusó de “beneficiarse de la guerra”.
Petroleras de todo el mundo han registrado grandes aumentos en sus ganancias. La saudí Aramco reportó el martes unos beneficios trimestrales de 42.400 millones de dólares, la segunda cifra más alta de su historia. Exxon Mobil, con sede en Texas, batió un récord la semana pasada con unos beneficios de 19.660 millones de dólares en los tres meses hasta septiembre, mientras que Chevron, con sede en Texas, se acercó a su récord el pasado trimestre con 11.230 millones de dólares.
BP está invirtiendo parte de los beneficios de los altos precios de crudo y gas natural en energía renovable, dentro de sus esfuerzos por alcanzar la neutralidad de emisiones de dióxido de carbono para 2050. En el tercer trimestre, la compañía compró Archaea Energy, que produce gas natural de vertederos y otros centros de procesamiento de residuos en Estados Unidos, y acordó comprar el 40,5% de Asian Renewable Energy Hub, que tiene previsto impulsar proyectos eólicos y solares en el oeste de Australia.
