Las semifinales del Mundial de 2018. La final del Campeonato Europeo en 2021.
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Inglaterra ha ido en alza en las principales citas del fútbol tras décadas de decepciones en el país que inventó el deporte.
¿Está Inglaterra lista para conquistar su primer gran título desde la Copa Mundial de 1966?
Los recientes resultados insinúan que no.
El equipo dirigido por Gareth Southgate lleva seis partidos sin ganar, la peor racha del seleccionado nacional en la antesala de un torneo de envergadura.
Algunos jugadores llegan fuera de forma o casi sin minutos en sus clubes. En ciertas posiciones — zaguero, lateral izquierdo, volante de contención — sencillamente no hay fichas de primer nivel. Y persisten las dudas sobre si Southgate tiene la sapiencia para hacer cambios tácticos oportunos en los partidos más importantes.
En lo que sí tiene experiencia esta selección es en llegar lejos en las grandes citas. Como dice el extremo Raheem Sterling, todo depende de que mantengan la serenidad en medio del sentimiento agorero que pueda cundir entre la afición y la prensa.
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“Siempre estamos bajo presión de ganar, y este pequeño bajón no es algo para que entremos en pánico”, dijo Sterling. “Tenemos una gran oportunidad por delante para demostrarnos que podemos volver a hacerlo”.
EL FUTURO DE SOUTHGATE
La prensa inglesa puede jugar un rol clave en la continuidad o no del técnico de Inglaterra, algo que Southgate comprobó en septiembre. Y los bonos del estratega se han desvalorizado a medida que se acerca el Mundial.
“Estamos en medio del ciclo de la guerra con la prensa”, dijo. “Es una experiencia que sabía se iba a dar en algún momento con este trabajo”.
La realidad es que Inglaterra llevaba mucho tiempo sin acceder a instancias decisivas. Sólo un técnico — el fallecido Alf Ramsey en 1966 — pudo llevarles a la final de un gran torneo. Southgate quizás está pagando el precio por la percepción de que es un timonel pragmático y porque nunca dirigió a un club de jerarquía.
Si Inglaterra no sobrevive a la fase de grupos o se despide en octavos de final, o incluso en cuartos, la presión sobre Southgate podría ser tan intensa hasta poner fin a un ciclo de seis años.
EL LÍO CON MAGUIRE
No hay otro jugador más cuestionado que Harry Maguire, cuya convocatoria está en duda.
El central es blanco de muchas críticas, algunas muy subidas de tono, por sus errores garrafales con la selección y con su club, Manchester United, donde perdió la titularidad. Maguire suele tener mejores prestaciones con Inglaterra que en el United, y Southgate le dio un voto de confianza en los recientes amistosos.
Pero Southgate advirtió que la situación podría cambiar si Maguire no logra recuperar galones en su equipo antes del Mundial.
Quizás sea la decisión más difícil para Southgate, dado que carece de otras alternativas en la posición de defensa central. Insistir con Maguire podría perjudicar las pretensiones de los ingleses y comprometer la propia continuidad del entrenador.
“En estos momentos hay que respaldar a nuestros mejores y más experimentados futbolistas, a menos que sea una situación insostenible", dijo Southgate.
CONTROL DEL MEDIOCAMPO
Durante mucho tiempo, Inglaterra sufrió para dominar los partidos en el mediocampo.
En este Mundial, Declan Rice y Jude Bellingham serán los responsables de la misión, puesto que Kalvin Phillips está casi descartado por una lesión.
Rice (23 años) y Bellingham (19 años) tienen sus virtudes. El primero es un medio de contención todoterreno, mientras que el segundo se proyecta como uno de los talentos más habilidosos en Europa. Pero quizás no tengan la madurez para afrontar la exigencia de un primer Mundial.
Inglaterra echó de menos a un centrocampista con presencia cuando dejó escapar una temprana ventaja ante Croacia en las semifinales del Mundial de 2018 y contra Italia en la final de la Eurocopa.
Lo que darían los ingleses por tener un volante creativo con la calidad técnica de un Luka Modric o Pedri González o Kevin De Bruyne.
RÉCORD GOLEADOR
Harry Kane fue el máximo goleador del Mundial de 2018, con seis dianas, y firmó otras cuatro en la Euro. Si sigue así, se convertirá en el goleador histórico de Inglaterra durante el Mundial.
El atacante de Tottenham ha anotado 51 goles con la selección y está a dos del récord Wayne Rooney.
