Sigue siendo un misterio el motivo del asesinato de tres miembros de una misma familia —entre ellos una niña de 6 años— en un parque de Iowa, admiten las autoridades que investigan si había algún nexo entre la familia y el presunto asesino.
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Hasta ahora, enfatizan, no han hallado ningún vínculo entre el acusado, Anthony Sherwin, y la familia finada.
Lo que se sabe es que Sherwin tiene 23 años, es oriundo de un suburbio de Omaha, Nebraska, llamado La Vista, no tenía antecedentes penales y al parecer mató a la familia al azar. Los padres del joven, que estaban acampando con él al momento del crimen, han expresado incredulidad ante la posibilidad de que él haya perpetrado semejante matanza.
El crimen ocurrió el viernes en la mañana en el parque Maquoketa Caves, a unos 289 kilómetros (180 millas) al este de Des Moines.
Los fallecidos son Tyler Schmidt, de 42 años; su esposa Sarah Schmidt, también de 42 y su hija Lula Schmidt de 6, oriundos de Cedar Falls, Iowa.
El hijo de la pareja, Arlo, de 9 años, resultó ileso, pero no queda claro si estaba en la tienda de campaña cuando los otros miembros de la familia fueron asesinados.
Mitch Mortvedt, subdirector del Departamento de Investigaciones Penales de Iowa, dijo el lunes que los detectives han hablado con el chico, pero no dio detalles sobre lo que dijo el menor.
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“En este momento, no hemos descubierto nada que nos indique el motivo del crimen”, expresó Mortvedt.
Los padres de Sherwin han sugerido la posibilidad de que éste escuchó disparos y sacó el arma del vehículo familiar para su propia protección, pero la policía descartó esa hipótesis.
“Sin revelar muchos detalles, en base a lo que hemos aprendido, estamos bastante seguros de que lo que hemos reportado es como ocurrieron los sucesos y de que él es el responsable”, indicó Mortvedt.
Las autopsias de los Schmidt y de Sherwin comenzaron el domingo, dijo Mortvedt.
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El corresponsal Michael Tarm en Chicago contribuyó con esta nota.
