No sólo la violencia de los tiroteos se encuentra en la mira de la administración de Joe Biden, los ataques armados de policías a minorías también están en el ojo del huracán.
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Ahora se reveló un video en el que un joven desarmado de 13 años, con las manos arriba, recibe impactos de bala por parte de los uniformados.
Demandan a policía de Chicago por disparar a joven de 13 años desarmado
Hay muchas aristas en el caso. Los abogados del chico sostienen que debido a las heridas en la espalda se encuentra con la movilidad reducida, su vida cambió por completo, mientras cuestionan al agente que optó por disparar, cuando sólo sostenía un celular en sus manos.
Y es que el policía, identificado por su abogado como Noah Ball, pensó que el sospechoso estaba apuntando con un arma, por lo que jaló del gatillo en una fracción de segundo.
En las imágenes de un nuevo video de cámara corporal, que fue tomado el 18 de mayor pasado, un uniformado salta de su automóvil para perseguir a un niño de 13 años que se había escapado de un automóvil presuntamente robado, para comenzar a correr.
Los policías siguen al chico hasta una gasolinera cercano al lado oeste de Chicago Marathon, cuando un agente dispara tres veces.
El joven había cedido
En el video corporal se muestra al joven al final de la persecución, que disminuye la velocidad, gira y parece levantar las manos cuando recibe un disparo.
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“La sugerencia de que: ‘Hey, tal vez esto fue sólo una distracción temporal, porque estaba involucrado en una persecución’; en primer lugar, están capacitados”, dijo Steven Hart, uno de los abogados que representan a la familia del adolescente. “Han pensado de antemano. Saben que se supone que deben activar sus cámaras y depende de ellos hacerlo. Nadie más puede hacerlo”.
La defensa del chico sostuvo que estaba tratando de rendirse, en el momento en que se dieron los disparos.
“Si todo lo que necesita es que alguien huya de la policía para justificar un tiroteo, tenemos problemas reales en esta ciudad y en este país”, dijo Hart
Los abogados del joven presentaron una demanda federal contra el Departamento de Policía de Chicago. “No puede caminar, levantarse, ir al baño, no puede conseguir su propia comida; quiero decir, su vida cambió para siempre”, dijo el abogado Andrew Stroth a CNN.
