LIMA (AP) — La primera dama peruana, Lilia Paredes, asistió el viernes en calidad de testigo a la citación de un fiscal que investiga a su hermana menor por el presunto delito de corrupción. Ésta se suma a otras indagaciones diferentes por el mismo delito que incluyen al presidente Pedro Castillo y a dos sobrinos.
PUBLICIDAD
Benji Espinoza, abogado de la primera dama, dijo a la prensa que su clienta respondió 30 preguntas en el local de la fiscalía, a pocas cuadras del Palacio presidencial, donde Lilia Paredes vive con el presidente, sus dos hijos y su hermana Yenifer Paredes, de 27 años, quien fue criada como hija desde pequeña por la ahora pareja presidencial luego de la muerte de la madre de la primera dama.
Paredes no habló con periodistas, pero su abogado dijo que “la primera dama ante la primera citación acude frente a las dudas de la fiscalía que hoy se han disipado”. Espinoza no quiso mencionar cuáles fueron las preguntas y respuestas de la diligencia por tratarse de una investigación reservada.
La fiscalía investiga por presunto tráfico de influencias —un tipo de corrupción— a Yenifer Paredes, quien fue grabada hace diez meses realizando una encuesta para un proyecto privado de agua potable y desagüe en un pueblo rural de los Andes y el video se difundió el domingo en una televisora local.
La fiscalía anticorrupción ha indicado que llamaron a declarar a la primera dama porque tras revisar el libro de visitas del palacio presidencial se detectó que existió una reunión en 2021 entre el dueño de la empresa encargada del proyecto de saneamiento y Lilia Paredes. Los investigadores también han citado para el lunes 11 a Yenifer Paredes y un día después al dueño de la empresa.
El delito de tráfico de influencias se castiga con hasta ocho años de prisión. Yenifer Paredes ha permanecido en silencio. No es el primer caso en que la familia del presidente está bajo escrutinio fiscal.
Dos sobrinos del mandatario —Fray Vásquez y Gian Marco Castillo— están prófugos luego que la fiscalía ordenó 36 meses de prisión preventiva contra ellos en un caso de corrupción que alcanza al mandatario, quien es el primer presidente en funciones investigado en la historia de Perú.
La nueva fiscal general Liz Benavides dijo la semana pasada, durante el inicio de su gestión, que irán “tras la investigación de cualquier acto delictivo ya sea del más poderoso o cualquier ciudadano común” y comentó que la justicia debe ser aplicada “caiga quien caiga y pese a quien le pese”.