JERUSALÉN (AP) — Las autoridades israelíes informaron el miércoles que dieron el visto bueno para que ultranacionalistas judíos puedan marchar por el corazón de la principal vía palestina de la Ciudad Vieja de Jerusalén a finales de este mes, una decisión que amenaza con reavivar la violencia en la ciudad santa.
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El Ministerio de Seguridad Interna dijo que la marcha se llevaría a cabo el 29 de mayo a lo largo de su “ruta habitual” a través de la Puerta de Damasco, una de las ocho en las murallas de la Ciudad Vieja de Jerusalén.
Cada año, miles de nacionalistas israelíes participan en la marcha, ondeando banderas israelíes, coreando canciones y, en algunos casos, consignas antiárabes, mientras pasan junto a espectadores y negocios palestinos.
El Ministerio de Seguridad Interna dijo que la decisión se tomó después de consultas con la policía.
La marcha celebra la captura de Jerusalén oriental por parte de Israel durante la guerra de 1967. Israel posteriormente se anexó el área, un paso que no es reconocido internacionalmente. Los palestinos reclaman el este de Jerusalén como la capital de un futuro Estado.
La guerra de Gaza del año pasado estalló cuando la marcha apenas comenzaba, incluso después de que las autoridades cambiaran la ruta en el último momento para evitar pasar por la Puerta de Damasco.
La Ciudad Vieja, en el este de Jerusalén, ha experimentado semanas de enfrentamientos violentos entre la policía israelí y los manifestantes palestinos, por lo que la marcha amenaza con desencadenar nuevos disturbios.
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Las tensiones también aumentaron el viernes pasado por la represión lanzada por la policía israelí durante el funeral de Shireen Abu Akleh, periodista de Al Jazeera. A medida que avanzaba la procesión fúnebre, la policía empujó y golpeó a los dolientes, lo que provocó que quienes cargaban el féretro perdieran el control del ataúd y casi lo dejaran caer.
Abu Akleh, una periodista conocida en la región, recibió un disparo mortal la semana pasada mientras cubría una incursión militar israelí en la Cisjordania ocupada. Los palestinos, incluidos algunos testigos que estaban con ella, dicen que la periodista cayó abatida por disparos de las tropas israelíes. Israel sostiene que en la zona estaban activos palestinos armados, y no está claro quién disparó la bala mortal.
