Como uno de los técnicos más meticulosos del fútbol mundial, Pep Guardiola está pendiente a todo.
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Imagínense entonces la sorpresa que el entrenador del Manchester City se llevó al comparecer a una rueda de prensa el martes y enterarse que uno de sus jugadores más veteranos acababa de revelar que quiere irse del club.
“¿Perdón?”, respondió Guardiola cuando le pidieron una reacción al anuncio de Fernandinho de que volverá a su natal Brasil al final de la temporada. “No sabía. Me estás dando la noticia”.
Apenas minutos antes, sin que Guardiola supiera, el volante de 36 años — pilar del City durante las últimas nueve temporadas — dijo que no contempla una décima campaña con el club inglés.
“Lo que quiero es jugar», dijo Fernandinho sin tapujos en la rueda de prensa previo al partido de vuelta contra el Atlético de Madrid por los cuartos de final de la Liga de Campeones. “Vuelvo a Brasil”.
Fernandinho ha sido uno de los baluartes del City desde que llegó procedente del Shakhtar Donetsk en 2013, sobre todo como un volante de contención.
Esta temporada, el cuatro veces campeón de la Liga Premier, pasó a ser el suplente de Rodri en el mediocampo, aunque sigue siendo un jugador con arraigo en el vestuario.
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“Con el paso de los años, me cuesta estar con las condiciones para ayudar al equipo como siempre he hecho”, dijo Fernandinho.
Completar su carrera en Brasil — no mencionó un posible club — le permitirá despedirse donde todo empezó, con el Atlético Paranaense en 2002.
“Quizás sea una decisión familiar, quizás quiere más minutos”, dijo Guardiola al especular sobre los motivos de Fernandinho.
