Estados Unidos y Ucrania han rechazado los esfuerzos del presidente ruso Vladimir Putin de presentar su guerra brutal en un marco narrativo falso, pero presentar un retrato más preciso de la invasión del Kremlin al pueblo ruso es otra cosa.
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Mientras las fuerzas rusas sufren miles de muertes y no pueden tomar las ciudades cruciales, Putin intensifica su represión de la información. El Kremlin ha clausurado los últimos tres medios informativos independientes, bloqueado las grandes redes sociales, sancionado leyes que pueden enviar a un periodista a la cárcel por desafiar su propaganda e insiste en llamar la guerra una “operación militar especial”.
Eso significa que la opinión pública rusa tiene escaso o ningún acceso a cualquier opción a la narrativa antiucraniana y antioccidental de Putin. Es un escudo térmico de Putin contra cualquier reacción a la guerra y las sanciones occidentales que han semiparalizado la economía rusa.
Perforar la burbuja propagandística de Putin es un objetivo estratégico para Ucrania y sus aliados occidentales. Han intentado una serie de medidas, abiertas y encubiertas, para llegar a los ciudadanos rusos comunes, desde alentar el uso de software que elude los bloqueos del internet hasta realizar reuniones informativas con influencers de TikTok. Se espera que las voces independientes que aún operan en Rusia, las de occidente y las exhortaciones directas de los ucranianos puedan convencer a las masas de que les están mintiendo sobre la guerra en el país vecino.
El problema ya no es “qué hacemos para detener la desinformación”, dijo el exembajador estadounidense en Moscú, Michael McFaul, sino cómo promover la información dentro de Rusia. “Un problema muy difícil”, acotó.
Uno de los pasos más importantes, dijo, es “financiar los medios rusos independientes que trabajan fuera de Rusia”.
The Associated Press habló con media docena de funcionarios actuales y en retiro en Estados Unidos y Ucrania acerca del reto. Los funcionarios estadounidenses reconocieron que cualquier refutación directa de la desinformación rusa encuentra una respuesta inmediata de Moscú, que la califica de propaganda norteamericana.
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En cambio, dijeron, el gobierno de Joe Biden trata de fomentar el flujo de información desde el exterior para que los ciudadanos comunes rusos puedan conocer por sí mismos la verdad sobre la guerra. Las fuentes hablaron bajo la condición de anonimato para revelar estrategias internas.
Muchas empresas occidentales han dejado de hacer negocios en Rusia. Pero de manera discreta, los funcionarios han alentado a los proveedores de servicios de internet que permanezcan en el país para que los rusos tengan los medios para hallar la información desde el exterior online. Celebridades conocidas en Rusia como Arnold Schwarzenegger han enviado por Twitter y Telegram mensajes y videos sobre las atrocidades de la guerra.
McFaul dijo que el discurso de Schwarzenegger fue “brillante” y añadió que esa clase de envíos deberían realizarse “todos los días”.
Ucrania ha forjado en gran medida la percepción occidental de la guerra por medio de videos y mensajes en redes sociales que destacan los ataque a civiles y la destrucción de barrios residenciales. El presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy se ha ganado la admiración del mundo con sus discursos para la cámara que se difunden online. En su último discurso antes de la invasión, en el que suplicó por la paz, dijo, “Sé que no mostrarán mi discurso en la TV rusa”.
El gobierno de Biden ha desclasificado informes de inteligencia sobre lo que dice son los planes de guerra de Putin para reducir su capacidad de llevarlos a cabo. Está aumentando los fondos de sus medios tradicionales para llegar a las audiencias de Europa oriental. Este mes agregó 25 millones de dólares a la Agencia de Medios Globales, que supervisa la Radio Free Europe/Radio Liberty y Voice of America.
Voice of America publicó instrucciones online sobre la manera de acceder a su sitio mediante un VPN o por otros medios para eludir las barreras del Kremlin. Estadísticas internas de la emisora indican que miles de rusos están usando esos métodos.
Y la Casa Blanca se reunió recientemente con influencers de TikTok, una reunión que provocó algunas miradas incrédulas, pero que algunos participantes consideraron útil.
Otro problema es cómo llegar a la gente que no lo quiere, y que también es una cuestión en Estados Unidos, Millones de estadounidenses creen erróneamente que la elección de 2020 fue un robo a pesar de los innumerables esfuerzos para refutar las mentiras de que hubo fraude.
Este ambiente de desinformación deleita al Kremlin y le ha ayudado en su campaña contra sus adversarios.
Los medios estatales rusos siguen difundiendo acusaciones falsas e infundadas sobre la necesidad de “desnazificar” el gobierno ucraniano.
Thomas Rid, profesor en la Universidad Johns Hopkins y experto en desinformación observó que Estados Unidos “en realidad no tiene una gran trayectoria” en contrarrestar narrativas falsas.
“Yolo haría a través de Ucrania”, dijo. “Tiene la proximidad, el lenguaje, los lazos familiares. Lo primero y principal es ayudarles a obtener y mantener el acceso a la información”.
