LIMA (AP) — La fiscalía ingresó el viernes por sexta vez al palacio presidencial de Perú, epicentro de varias indagaciones preliminares por corrupción ligadas a funcionarios del gobierno, en tres de las cuales está investigado el presidente Pedro Castillo.
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El ministerio público dijo, en un comunicado por sus redes sociales, que el allanamiento iniciado en la madrugada investiga un contrato de la petrolera estatal Petroperú que se «habría coordinado a través de una serie de irregularidades” gestadas en octubre de 2021 en el despacho presidencial.
Desde noviembre se ha convertido en una figura frecuente para los peruanos observar a miembros de la fiscalía ingresando al palacio presidencial en busca de pruebas por casos de corrupción. La indagación del viernes incluye a funcionarios, empresarios y al mandatario Castillo, quien recién será investigado al finalizar su mandato en 2026, según una decisión de la fiscal general Zoraida Avalos.
Castillo tiene otras dos investigaciones preliminares detenidas hasta el fin de su mandato: su presunta participación para favorecer a una empresa que ganó una licitación para construir un puente y otra presunta participación para intervenir en los ascensos de generales del Ejército.
La fiscalía ingresó tres veces en diciembre al palacio presidencial, en una de ellas interrogó al mandatario y en el resto para recabar pruebas documentales.
En enero la fiscalía ingresó a la sede del gobierno para verificar las cámaras de seguridad en otra investigación al exsecretario presidencial Bruno Pacheco, quien presuntamente presionó a la agencia tributaria en favor de algunas empresas.
En noviembre la fiscalía anunció que halló 20.000 dólares en un baño del palacio presidencial que usaba el entonces secretario Pacheco, quien dijo que ese dinero eran parte de sus ahorros. Semanas después, añadió que era una suma enviada por sus hermanos para poder pagar su defensa legal.
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En Perú casi todos los expresidentes de los últimos 37 años han sido investigados por corrupción. Uno está condenado, otro está detenido y a punto de ser extraditado desde Estados Unidos, mientras un tercero se suicidó poco antes de que la policía lo detuviera en su residencia en 2019.
Castillo, quien prometió combatir la corrupción que azota al país, también afronta una crisis política extendida por su descuido en nombrar a funcionarios claves.
En medio año de gestión cambió cuatro veces de gabinete y su popularidad cayó cinco puntos hasta 33%. Su impopularidad en enero es de 60%, mientras que 7% no precisa, según un sondeo nacional de la firma Ipsos Perú publicado el 14 de enero. El margen de error es de 2,8 puntos porcentuales.
Castillo inició su gestión el 28 de julio de 2021.