NANTES, Francia (AP) — El candidato izquierdista francés Jean-Luc Melenchon intentó el domingo reanimar su alicaída campaña para las elecciones de abril con un evento “inmersivo” que incluyó videos, sonidos y hasta olfatos.
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El inusual evento en Nantes, una ciudad del oeste del país, ocurre en momentos en que la izquierda francesa está dividida y en apuros para hacerse sentir en medio de una campaña donde han recibido más atención los candidatos de derecha o ultraderecha.
Según su plataforma de campaña, Melenchon quiere el gobierno francés garantice el pleno empleo, se retire de la OTAN, desacate las normas de la Unión Europea, legalice el cannabis, renacionaliza algunas empresas, impida el aumento de los precios de los combustibles, aumente los impuestos a las multinacionales y a los ricos e invierta más en el combate contra la discriminación racial.
Melenchon prometió que el mitin del domingo enfatizará “lo positivo” en una época caracterizada por la hostilidad política. Pero Melenchon — un político dado a la retórica y notorio por su temperamento — es una figura divisiva que se niega a formar alianza con otros candidatos de izquierda para enfrentarse al presidente Emmanuel Macron, que probablemente buscará la reelección.
En el evento del domingo, la sala de exhibición tenía las paredes y techos convertidos en pantallas para la experiencia “inmersiva”. La campaña de Melenchon afirmó que la intención era “unir los sentidos y los ánimos” y convencer a la gente de izquierda de que su causa no está perdida.
Melenchon, de 70 años, ha criticado a las normas impuestas para prevenir el coronavirus y para vacunar a la población, calificándolas de excesivas. Para entrar al evento no se requirió constancia de vacunación, pero los organizadores repartieron mascarillas a los asistentes.