Famosos, glamur, brillos, color… y monederos en forma de vagina: la Semana de la Moda de Nueva York (New York Fashion Week) 2020 rindió homenaje, a inicios de febrero, a todas las mujeres, de la parisina en la Gran Manzana a la dramática y contenida, de las transexuales a las actrices porno. Este es un resumen de los shows más destacados.
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Carolina Herrera
Una inyección de color y refinados vestidos de ‘exuberancia disciplinada’ centraron el desfile de Carolina Herrera, que apostó a Wes Gordon como creador hace dos años, tras el retiro de la afamada diseñadora venezolano-estadounidense. Tejidos lujosos, terminación impecable y líneas simples crearon un drama policromo en rojo y fucsia, amarillo (a veces con negro) y azul eléctrico, al cual se sumó el tradicional blanco y negro de la casa. ‘En este tiempo mi misión y mi obsesión ha sido traer a la marca tanto color como sea posible. Amo el color, me encantan las combinaciones de colores inusuales’, dijo Gordon a la AFP tras el desfile. En estos tiempos ‘de grisura e incertidumbre (…) trato de que mi vida y las cosas sobre las cuales tengo impacto sean lo más coloridas posibles’, explicó.
Chic Longchamp
La marca francesa Longchamp se inspiró en la parisina elegante y femenina de los años 70, al estilo de Catherine Deneuve y Romy Schneider, con un toque moderno. La hija de Kate Moss, Lila Moss, la modelo Coco Rocha y Kendall Jenner, embajadora de la marca, observaron desde la primera fila las bermudas de cuero hasta la rodilla, botas altas y ajustadas de charol y faldas y vestidos bordados. Hubo un par de capas con reminiscencias de El Cuento de la Criada: una bordó de napa con capucha, y otra roja y negra, con piel estampada en leopardo. La directora creativa de esta empresa familiar conocida por su marroquinería, Sophie Delafontaine, dijo que siente que puede tomar más riesgos en Nueva York que en París. ‘Me siento más libre en Nueva York. Cuando viajamos vamos más lejos, exploramos más’, sostuvo tras el desfile.
Tory Burch y la nostalgia
Con las actrices Julianne Moore y Lucy Liu en primera fila, así como la editora jefe de Vogue Anna Wintour, la diseñadora Tory Burch basó su show del domingo en telas floreadas, inspiradas en porcelanas turcas, inglesas y francesas. La colección de otoño-invierno 2020, presentada en la casa de remates Sotheby’s, incluyó vestidos de crepe con mangas adornadas y una campera de napa estilo Sgt. Pepper.La artista neoyorquina Francesca DiMattio diseñó los estampados, y las modelos caminaron entre 11 de sus esculturas a través de cinco salas. Las estampas de DiMattio ‘esfuman las líneas de femineidad y masculinidad’, dijo Burch a la AFP. ‘Me identifico con eso, y con toda la nostalgia de la cerámica’.
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Actrices porno en la pasarela
Las actrices porno Asa Akira, Marica Hase y Jade Kush fueron las vedettes del desfile ‘Herotica’ de la marca Namilia, que montó su show en colaboración con la plataforma de videos pornográficos Pornhub. ‘Nuestra marca es todo sobre el ser positivo en relación al sexo y desafiar los límites’, dijo a la AFP Nan Li. El dúo de diseñadoras de Berlín integrado por Li y Emilia Pfohl ya había estrenado en 2015 una colección titulada ‘My pussy, my choice’ (Mi concha, mi elección).El desfile se inspiró en el universo del porno tal como es definido por los hombres pero también en la representación de los occidentales de Asia.Una mujer tipo caja de fideos, con flecos que caen en cascada; botas de motoquero; minifaldas ultra cortas y tops con pompones bordados en el pecho: Namilia fascinó al público, que recibió de regalo un pequeño monedero de cuero con forma de vagina.
Orgullo negro: Christopher John Rogers
El osado diseñador afroestadounidense de 26 años es una estrella en ascenso. Antes trabajó en Diane Von Furstenberg (DVF) y ganó en noviembre el premio anual del Consejo de Diseñadores de Estados Unidos y Vogue (400.000 dólares). En el NYFW deslumbró con una colección ultracolorida, glamorosa y sexy. Con ‘drag queens’ aplaudiendo en primera fila, Christopher John Rogers, que ha vestido a Rihanna y Lady Gaga, envió a la pasarela un arco iris de sofisticados trajes, overoles y vestidos en colores monocromos y telas brillantes como sedas tornasoladas, tafetas y lamés, o decoradas con cristales Swarovski. Las glamorosas modelos -varias transexuales- caminaban lentamente, orgullosas y confiadas. ‘Esta ropa es cara, y debe lucir cara’, dijo Rogers a Fashion Week Daily tras el desfile.
AFP
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