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A sus 42 años, demandó a su padre por pensión alimenticia

Estos recursos serán cruciales para respaldar a Juan mientras persigue sus estudios universitarios.

Los padres deberían ser responsables de atender a sus hijos
Los padres deberían ser responsables de atender a sus hijos (Freepik)

En un caso legal sorprendente, Juan, un hombre de 42 años, ha ganado una batalla legal contra su propio padre para obtener la pensión alimenticia que le permitirá continuar sus estudios universitarios y perseguir su sueño de convertirse en médico cirujano. La Procuraduría de Justicia del Estado de México (PJEM) confirmó la resolución a través de su página de internet, revelando los motivos detrás de esta decisión sin precedentes.

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Juan, a lo largo de su vida, ha enfrentado carencias y limitaciones que lo obligaron a trabajar desde una edad temprana, poniendo en pausa sus aspiraciones de convertirse en médico. La demanda presentada por Juan argumentó que estas dificultades surgieron debido a la falta de apoyo financiero de su padre, lo que le impidió seguir una carrera académica y profesional sin interrupciones.

Con estos recursos, el hijo podrá continuar con sus estudios universitarios

La resolución judicial a favor de Juan incluye el otorgamiento de pagos retroactivos de alimentos y pensión alimenticia por parte de su padre. Estos recursos serán cruciales para respaldar a Juan mientras persigue sus estudios universitarios y trabaja para cumplir su sueño de convertirse en médico cirujano.

La historia de Juan se entrelaza con el sacrificio y el esfuerzo de su madre, quien, desde su infancia, se dedicó a trabajar arduamente para sacar adelante a su hijo. Sin embargo, estos esfuerzos no fueron suficientes para permitir a Juan continuar con sus estudios sin interrupciones.

La decisión judicial destaca la importancia de la responsabilidad parental y el derecho de un hijo a recibir el apoyo necesario para alcanzar sus metas educativas y profesionales. La resolución reconoce las dificultades enfrentadas por Juan y, en consecuencia, establece un precedente al garantizar que los padres cumplan con sus responsabilidades financieras, incluso en situaciones donde la demanda proviene de un hijo adulto.

Este es un testimonio de perseverancia y determinación, nunca es tarde para perseguir los sueños. La decisión judicial no solo garantiza un futuro más brillante para Juan, sino que también destaca la importancia de brindar el apoyo necesario para que cada individuo alcance su máximo potencial, independientemente de la edad.

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