Juguetones y divertidos. Algunos perros se han ganado el corazón de los humanos por ser cariñosos y amigables dentro del hogar, a tal punto de ser considerado un miembro más de la familia. Son apegados con sus cuidadores, demuestran lealtad y son ideales para que los niños jueguen con ellos.
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Antes de adoptar una mascota es bueno investigar qué raza de perro es la más conveniente para llevar al hogar. Los veterinarios recomiendan a los dueños pensar en el espacio que dispondrán dentro de la casa para el nuevo amigo peludo y si cuentan con el presupuesto necesario para sus cuidados como vacunas, aseo y alimentación.
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Mencionan que todos los perros son afectuosos, unos más que otros, pero sin importar su raza, tamaño o color, ellos encontrarán la forma de expresar toda su simpatía. Pero si de razas amistosas se trata, estos son los más especiales.
Dálmata
Es un perro que se distingue por su elegancia, popularidad y personalidad extrovertida. Adora sentirse rodeado de su familia y es el momento que más disfruta durante el día. Este can no dudará en demostrarte su cariño con su movimiento de cola o una lamida en tu mejilla. Son ideales para los deportistas porque les gusta la actividad física, será tu compañero especial para salir a trotar.
Labrador Retriever
Es famoso por mostrar ampliamente su afecto y cariño. La raza fue desarrollada para ayudar a los pescadores de Terranova por lo que se trata de un perro de trabajo útil y muy amistoso. Se caracteriza por ser un perro bondadoso, leal, inteligente y derrocha mucha energía. Vive para cuidar a su manada, le encanta los mimos y no duda en acercarse para recibir caricias. También es recomendado como perro de terapia.
Golden Retriever
Considerado el perro más amistoso y juguetón de todas las razas de can. También es un acompañante de terapia y son excelentes rastreadores, por eso trabajan en cuerpos de rescate y policías. Es muy inteligente por lo que es bastante fácil de entrenar y le encantará jugar con tus hijos pequeños. Además de ser súper protector con los suyos, madura después de cuatro años, por lo que se comportará como un cachorro los primeros años de vida.