Hay momentos que marcan la vida y uno de estos, es el que se presenta en esta historia. Se trata del detective Walter Sweeney y del niño al que salvó de morir ahogado. Ambos fueron impactados por una experiencia que los marcó de por vida.
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Actualmente, el niño tiene 12 años. Cuando era casi un bebé, estuvo a punto de morir, pero el detective pasaba cerca de donde se accidentó y lo salvó, cuando ya estaba practicamente estaba muerto entre los brazos de su madre.
Sweeney pasaba en su auto cerca del sitio del accidente. Iba con su hija de un año, cuando escuchó la llamada de emergencia por un niño que cayó en una piscina en Severn, de Carolina del Norte, Estados Unidos.
Atendió la llamada y se dio cuenta que estaba a unos pocos metros de distancia, así que fue directo al sitio, y corrió para llegar lo más rápido posible a prestarle auxilio, refiere Mag Comercio.
Al llegar, vio al niño sin signos vitales en los brazos de su mamá. Estaba azul. Parecía muerto, pero esto no lo hizo rendirse. El detective siguió poniendo de su esfuerzo con la esperanza de reanimarlo.
“Estaba azul, sus labios estaban azules, sus dedos estaban azules, y le di un par de golpes en la espalda y antes de comenzar la RCP le hice algunas compresiones en el pecho antes de que pudiera hacer el boca a boca, comenzó a escupir agua y el color comenzó a regresar”, dijo a WMAR, según precisa Mag Comercio.
Junto a la mamá del niño, esperó a que llegaran los paramédicos, quienes se encargaron de dar al pequeño el resto de los cuidados médicos.
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Sweeney no volvió a ver al infante.
Reencuentro
Este año, a Sweeney lo ascendieron. Sus compañeros le hicieron una fiesta sorpresa, para la cual invitaron al niño.
El detective no pudo contener las lágrimas al ver al pequeño, que ya no es tan pequeño. Ahora, tiene 12 años.
Ambos se abrazaron, conmoviendo a todos en la fiesta. El video del reencuentro lo publicó Good Morning America, que además presentó las palabras de agradecimiento del detective por el homenaje.
