Estilo de Vida

Paso 34 años en prisión por un crimen que no cometió

Este lunes, la Oficina del Fiscal del Estado de Broward y la Unidad de Revisión de Convicciones (CRU), determinaron la inocencia de Sidney y ordenaron su liberación inmediata

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Prisión. Prision Cells at Old Idaho Penitentiary in Boise, Idaho (Robert Crow/vividcorvid - Fotolia)

La trágica historia de un hombre en Fort Lauderdale que pasó tres décadas en prisión por fallos de la justicia ha conmovido no solo a la comunidad sino que además al mundo tras haber sido difundida por los medios.

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Se trata de la terrible experiencia por la que tuvo que atravesar Sidney Holmes, quien hoy en día tiene 57 años. El hombre fue acusado por hechos que ocurrieron en 1988 y recibió una escandalosa condena de 400 años, siendo inocente de su presunto crimen.

Después de un muy breve juicio el hombre recibió cargos por cómplice de robo. A pesar de eso, siempre mantuvo su inocencia y aseguró no haber cometido ningún delito. Sin embargo, ese joven de entonces 22 años tuvo que pasar la mayor parte de su vida tras las rejas.

Escribió a una organización que se especializa en este tipo de casos

Por suerte, investigadores encontraron su caso y lo reavivaron. El acusado escribió a Innocence Project of Florida, expresando que llevaba más de 30 años privado de libertad, siendo inocente, y estos se movieron a su rescate.

Innocence Project of Florida (IPF) es una organización sin fines de lucro que busca exonerar a personas condenadas injustamente en el estado y así se pudo solventar el caso de Holmes, ya que los expertos descubrieron que la sentencia se basó en gran medida en el testimonio de un testigo, que determinaron era “incorrecto”.

El fiscal estatal adjunta, Arielle Demby Berger, agregó que no habían ni huellas dactilares, ni evidencia física. Asimismo, el vehículo utilizado en el escape del robo no coincidía con el de Holmes.

Esta investigación duró dos años y medio, hasta que finalmente, funcionarios de la Oficina del Fiscal del Estado de Broward y la Unidad de Revisión de Convicciones (CRU), determinaron la inocencia de Sidney y ordenaron su liberación inmediata.

“Nunca perdí la esperanza y siempre supe que llegaría este día. No podía esperar para abrazar a mi madre en el mundo libre por primera vez en más de 34 años”, declaró. No obstante, no pudo evitar expresar su frustración por lo ocurrido. “Me han arruinado la vida”.

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