Se puede decir que por un milagro una nena de tan solo dos años no perdió la vida el pasado lunes 10 de octubre, luego que un empleado de la empresa de alquiler de autos en el Aeropuerto Internacional de Daytona Beach, la encontrara llorando dentro de un auto en el asiento trasero devuelto horas antes por su propio abuelo y que increíblemente éste se olvidara de ella.
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Según la Oficina del Sheriff del Condado de Volusia, la menor de edad estuvo encerrada dentro del vehículo alrededor de 45 minutos y luego de varios análisis médicos se determinó que no sufrió ningún tipo de problemas de salud. También se informó que “los agentes llegaron y encontraron al empleado que cargaba al niño, cuyo rostro estaba cálido y surcado por lágrimas secas, pero respiraba normalmente”, dijo la oficina del alguacil.
Los testigos y las autoridades estiman que la pequeña estuvo expuesta a altas temperaturas debido a que los vidrios del auto estaban completamente cerrados durante el tiempo que estuvo abandonada, por lo que se calcula que tuvo que resistir cerca de 80 grados.
Abuelo arrestado y arrepentido
David Towner, de 62 años fue el adulto responsable del hecho por el cual fue arrestado sin presentar inconveniente y resistencia ante las autoridades del estado de la Florida, los cuales indicaron que el involucrado se mostró muy arrepentido y que en todo momento cooperó con los agentes policiales.
Hasta los momentos se detalló por parte de la cadena CNN que Towner fue acusado por negligencia infantil y está recluido en la cárcel del condado de Volusia con una fianza de 2.500 dólares. Luego de confirmar su buen estado físico, la niña fue devuelta a su madre y se notificó al Departamento de Niños y Familias.
Según No Heat Stroke, sitio web que rastrea las muertes por autos calientes, en lo que va de este 2022 se han registrado en los Estados Unidos la muerte de veintinueve niños por insolación vehicular, superando las veintitrés víctimas fatales del pasado 2021. Dicho portal asegura que la mitad de todas las tragedias mencionadas fueron a raíz del olvido de los menores por parte de sus cuidadores.
