La controversia generada por los comentarios de Sofía Rivera Torres, Eduardo Videgaray y José Ramón San Cristóbal, conocido como El Estaca, hacia Lucerito Mijares ha escalado rápidamente, involucrando a figuras prominentes como Lucero y Manuel Mijares, padres de la joven cantante.
PUBLICIDAD
Todo comenzó cuando Lucero defendió públicamente a su hija en redes sociales. En su mensaje, instó a la sociedad mexicana, a sus seguidores y a otros famosos a “cancelar para siempre” a los comediantes implicados. Esta reacción provocó una respuesta inmediata de El Estaca, quien consideró que Lucero había exagerado la situación.
Lucero defiende a su hija a capa y espada
“Ofrecimos la disculpa de la mejor manera que se nos ocurrió y las redes sociales están ofendidísimas. La verdad me importa muy poco, pero no puede ser que en este país uno ofrezca una disculpa y se pongan en ese plan; de postre, la mamá nos puso un tuit: ‘cancelados para siempre’”, expresó José Ramón San Cristóbal en el programa ´La Corneta’.
El Estaca argumenta que la reacción de Lucero ha intensificado la fricción y ha magnificado innecesariamente la situación. En un intento por calmar las aguas, San Cristóbal se dirigió directamente a Lucero y Mijares, sugiriendo que la respuesta ha sido desmesurada.
“Nosotros siempre hemos brindado un trato más que amable hacia ti, mi querida Lucero. Tanto tú como Manuel, tu exesposo, me conocen bien. Es comprensible que los asuntos relacionados con los hijos puedan generar preocupación, sin embargo, la situación actual se ha magnificado innecesariamente. Ya se ha extendido una disculpa; debería ser suficiente para cerrar el asunto”, manifestó San Cristóbal.
El presentador concluyó con un mensaje dirigido a Lucero, Manuel Mijares y Lucerito Mijares: “Quisiera volver a ofrecerle a Lucerito una disculpa si es que le ofendió alguno de los chistes que hicimos. Un saludo tanto a Manuel Mijares como a Lucero madre, creo que está muy enojada y se te va a tener que quitar solita porque no es para tanto”.
Este incidente ha puesto en el centro de atención el delicado equilibrio entre la comedia y el respeto, especialmente cuando se trata de figuras públicas y sus familias. Mientras algunos defienden la postura de Lucero como una madre protectora, otros consideran que la reacción ha sido exagerada y que la disculpa de los comediantes debería ser suficiente para dar por terminado el conflicto.
