Jaime Bayly se caracteriza porque las historias que cuenta en su canal de YouTube son columnas habladas. Sus relatos están cargados de ironía y comicidad, con toda la serenidad con la que suele hablar. Atribuye a lo que le sucedió a la intervención del “presidente Guillermo Lasso”.
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El problema que tuvo el escritor en el aeropuerto internacional José Joaquín Olmedo en Guayaquil fue en Migraciones. Bayly narró que al ingresar al país, el funcionario le hizo varias preguntas y le explicó que había entrado al Ecuador en 2003 con un pasaporte peruano, y que ahora quería entrar con su pasaporte de los Estados Unidos.
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Ciudadano norteamericano desde 1997, Bayly dice no usar su pasaporte peruano. “Está caducado, no lo uso”, dijo. Aunque le hicieron algunas preguntas logró entrar a territorio ecuatoriano sin pensar que iba a presentársele un problema peor cuando quisiese regresar a su casa en Miami.
¿Qué le sucedió a Jaime Bayly en el aeropuerto de Guayaquil?
La agente le dijo que no podía salir de Ecuador porque había una discrepancia entre el pasaporte con el que entró y el pasaporte con el que pretendía salir. “Primero pensé que el alcalde Guayaquil es correísta, es mi enemigo político, pero pensé: ‘Migraciones no puede depender de la alcaldía de Guayaquil”, relató. “Me van a acusar en Guayaquil de haberme cambiado de nacionalidad y haberme casado acá. Entré con pasaporte peruano y divorciado y quiero salir con pasaporte estadounidense y casado”, señaló.
El escritor dijo que la agente de migraciones que lo atendió tenía “cara de chucky, mirada de película de terror con destellos satánicos”. Dijo que empezó a ver en su iPad que Migraciones “depende del ministro de Gobierno, vi que se llamaba Henry Cucalón. Es ministro de Lasso, Lasso está resentido conmigo, yo lo apoyé en la campaña y a poco de asumir lo empecé a criticar (...) Básicamente dije que era un presidente inepto. Pensé que por eso, su ministro Cucalón no me dejaba salir del país”, explicó.
“En algunos países ‘cuca’ significa pene, en Chile es la furgoneta de la policía que se lleva a los detenidos. Dije, estoy jodido”, narró, ahora en Miami. “Fue horrible, lo quiero contar. Hay dos opciones, la benévola es que el agente a mi llegada y la agente ‘chucky’ a mi salida son unos incompetentes”, planteó.
El escritor peruano escribió que “la malévola es que me hicieron pasar un mal rato deliberadamente a propósito en venganza por mis críticas al presidente Lasso y de su ministro Cucalón”, refirió.