De un lado del ring está el cantante Gian Marco; del otro, los presentadores Rodrigo “Peluchín” González y su compañera Gigi Mitre. Una vez más se encararon tras la polémica que surgió con el cantante y sus palabras en contra del programa Amor y Fuego.
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El intérprete de “Tu no te imaginas” y “Sácala a bailar”, se ganó el desprecio de los seguidores luego de acusar a los presentadores de Willax de “ganarse el dinero investigando la vida de la gente... debe ser lindo ganar plata sobre eso”, palabras que hicieron enfurecer a Rodrigo, también a los fanáticos que descargaron al músico en sus redes sociales.
“La gente me sigue diciendo que soy un soberbio, que soy un déspota”, dijo el cantante en unas nuevas declaraciones al reportero de Amor y Fuego, donde además admitió los efectos de sus palabras: la pérdida de más de 30.000 seguidores tras sus ácidas palabras a Peluchín.
“Tengo una rabia muy grande hacia tu programa”, declaró el músico, palabras que fueron respondidas por Peluchin y Gigi a quienes les pareció que Gian Marco está “más envarado que la Ethel”, en alusión a la presentadora de América Hoy.
Rodrigo no pasa la página y lanzó otro dardo contra el artista. “Después de haberlo escuchado, sigo sin entender las cosas de las que él me acusa y la forma en la que lo ha manejado”. Gigi apoyó a su compañero y aseguró que “el equipo del artista parece que solo cuenta una parte de lo que se dice en el programa, esa gente a su alrededor no le informa de todas las notas que han habido”.
Peluchin insistió en que tampoco le interesa “ser amigo” del cantante como apuntó en su réplica. “¿Estoy siendo mal interpretado? A veces uno cree proyectar una cosa pero en el fondo la gente percibe otra, ¿Gigi, pareciera que yo muriera de ganas por la amistad de Gian Marco?”, dijo en tono irónico.
En medio de la polémica, Gian Marco recurrió a las redes sociales que tantas veces ha criticado e insistió en defender su vida personal. “Mi trabajo es una cosa, pero mi vida privada no es noticia, es mi vida, es mía y de nadie más. Nadie tiene derecho a manosear, meterse y tocar lo mas sagrado... No le hago daño a nadie con mi trabajo, al contrario…la música sana. La música siempre hablará por mi. Aquí sigo…en este mundo que nos tocó vivir”.