Es una serie para adultos, pero chocó de frente con la “rígida” postura de la iglesia católica. Mi Pequeño Demonio es el nombre de una serie de dibujos animados, que el Vaticano le enrostra a Disney, a través de FX. A través de su canal oficial, ACI prensa, iniciaron la alarma que se ha llevado de misa en misa. Los sacerdotes hablan de ella al terminar los oficios religiosos. “Es una blasfemia, no dejen que en su casa la vean”, dijo uno en Lima.
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La descripción de la serie es totalmente frontal, según el Vaticano. “Trece años después de quedar embarazada por Satanás, una madre renuente, Laura, y su hija del Anticristo, Chrissy, intentan vivir una vida ordinaria en Delaware. Pero son constantemente frustrados por fuerzas monstruosas, incluido Satanás, que anhela la custodia del alma de su hija”, citaron.
En los grupos de Whatsapp de los más acérrimos fieles católicos, se envían videos de análisis de la serie. El tiktoker Josué Valero publicó un video en su cuenta, que ya supera los 1.5 millones de visualizaciones. “La misma compañía que sacó este programa para niños, lanza el programa Mi Pequeño Demonio”, criticó. El creador tiene contenido relacionado con la lectura de la biblia.
La reacción por Mi pequeño demonio
En la calle, Mi Pequeño Demonio se convirtió en un tema de conversación. Muchos defienden que al tratarse de un programa para adultos, no hay ningún problema en que se transmita. Otros señalan que sí deben censurarlo “porque al ser de dibujos animados atrae a los niños”. Algunos apuntan a que es una “ofensa” a la creencia cristiana.
“¿O sea que un adulto no puede decidir qué ver y qué no, solo por qué a alguien no le agrada?”, “No hay que ser católico, o de por sí religioso, para saber que eso igual no es buena enseñanza y además tiene muy mala energía”, o “Es una serie para adultos, y está en Hulu, no en Disney +, por lo que si un niño acaba viendo eso sería por descuido de los padres”, escribieron usuarios de Tiktok.
