No cabe duda de que “El juego del calamar” fue más allá de una simple serie asiática, al convertirse en un fenómeno del que la gran mayoría habla e interactúa.
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El éxito de “El juego del calamar”
La producción surcoreana ya hizo historia, tras romper el récord de más reproducciones de Netflix, al alcanzar los 111 millones, para convertirse en el primer proyecto del gigante del streaming que rebasa las 100 millones de vistas en su primer mes.
Es tanto el boom, que las parodias y referencias se encuentran por todos lados. En México, ya se venden los disfraces rosas con caretas de figuras geométricas, como los que utilizan los soldados que cuidan a los jugadores, para las fiestas de Halloween.
Además, en la web se pueden hallar cientos de memes y reacciones curiosas, en la que aparecen los protagonistas, la niña del primer juego, el anciano conocido como número 1 y los enmascarados, entre otros.
México trabaja en su versión de “El juego del calamar”
Por ese motivo, en el país azteca ya se trabaja en una producción para realizar “El juego del Calamar a la mexicana”.
Así, Simón Levy, exsubsecretario de Planeación y Política Turística, abrió una convocatoria junto al influencer Diego Ruzzarin y los hermanos Fernando y Billy Rovzar, del estudio Lemon Studios, para que sus seguidores les manden propuestas de guión, con el fin de tropicalizar la exitosa historia surcoreana.
Este equipo creativo sostuvo que la intención es agitar a la sociedad con un producto que ponga a pensar a la gente, pero a la vez entretenga.
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En un clip en sus redes sociales, el empresario indico que la alianza, además de desarrollar y producir la versión tricolor de “El juego del calamar”, también trabajará en una plataforma “que va a dar mucho de qué hablar”.
Rovzar aseguró que la recepción de las ideas y guiones se hará a través del correo de Lemon Films: contenidos@lemonfilms.com.
Mientras tanto, Ruzzarin, que se encarga de crear contenido para YouTube e Instagram, indicó que se encuentra emocionado por el proyecto y explicó que la pieza que buscan es una que “explore el comportamiento humano bajo la presión de la deuda, desigualdad y falta de oportunidades”.
“Buscamos un retrato de la intimidad y sufrimiento de nuestra realidad invisible”, dijo.
Lemon Films ha trabajado en conjunto con Netflix en las producciones “Monarca” y “Control Z”.