El príncipe William y Kate Middleton se presentaron a la boda real de la princesa Eugenia y tuvieron un momento de cariño entre ambos sorprendentemente lindo y súper raro. Lo que para una pareja normal significaría un beso público o incluso una sesión de besos, para William y Kate significó tomarse de las manos durante la ceremonia de la prima de William, sentados en el banco de la iglesia.
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William y Kate rara vez se dan la mano en eventos públicos gracias a que siguen al pie de la letra el protocolo de la familia real de no mostrar signos de afecto mutuo o tocarse, así sea agarrarse de las manos, en público pero la boda de Eugenia es técnicamente un evento familiar, lo que significa que pueden hacerlo.
Por supuesto, no tienen nada sobre Meghan Markle y el Príncipe Harry, quienes básicamente no pueden parar de demostrar el gran amor que se tienen el uno hacia el otro, se frotan la espalda y se besan en los partidos de polo.
Fuente Nueva Mujer
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