Conciertos en Lima.
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Es cierto que no estamos para celebraciones. Las lluvias y huaicos no cesan y aún falta llevar mucha ayuda para nuestros hermanos afectados. Sin embargo, el Happy Ending, festival organizado por Veltrac como fin oficial del verano, ya estaba sobre la marcha y el show debía continuar.
Era un oasis en Lima: decoración íntima, food trucks, dos escenarios y una zona electrónica que repensaron parte del espacio del Parque de la Exposición. Y si bien era como ser trasladado a algún importante festival del mundo, la conciencia social no estuvo ausente. El 15% de lo recaudado en entradas fue destinado a los damnificados y el concierto mismo fue un punto de acopio de donaciones.
Dejando eso en claro, el aspecto estrictamente musical del Happy Ending fue alucinante. Fue un verdadero desborde de sonidos variados, foráneos y locales, estridentes y calmos, electrónicos y acústicos. Todo bajo un despliegue técnico (casi) impecable.
Los colombianos de Bomba Estereo rompieron fuegos exactamente a las 9 p.m. con ’Solo tu’, tema de su álbum ’Amanecer’. Con su andar violento y afilados versos, Liliana Saumet nos llevó a todos a un viaje psicodélico de una hora. En el camino nos dejamos llevar la cadencia de Somos dos, Cumbia Psicodélica, Fiesta y Fuego, infaltable himno de guerra de los ‘colochos’.
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La batahola de versos continuó de inmediato en otro escenario con Menores, dupla femenina de Hip Hop peruana que demostró gran aplomo y solidez en sus frases.
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De regreso al escenario principal, los canadienses de Caribou, liderados por el músico y matemático Daniel Snaith, sin duda alguna fueron lo mejor de la noche -con las disculpas respectivas a los seguidores de Bomba y Sublime-. Un arsenal de sintetizadores, voces, instrumentos de percusión y guitarras sirvieron a los canadienses para crear una atmósfera única y elevar la nave del festival al espacio. Un ‘trip’ sin regreso.
Como para bajar las revoluciones, una vez más en el escenario secundario, la banda revelación We the Lion se hizo presente con su indie folk desenchufado.
El fin de fiesta llegó con Sublime with Rome. La descarga de ska fusionada con rock & roll abarcó por completo el Parque de la Exposición con temas como ‘Date Rape’, ‘Let’s Go Get Stoned’, ‘April 29, 1992’ y, por supuesto, ‘What I Got’ y ‘Santeria’.
Pero pese a la entrega de los Sublime y la buena respuesta del público, la presentación estelar se vio opacada por factores técnicos: el bajo llegaba a saturar los parlantes y la voz de Rome, por momentos, era casi imperceptible.
Aún así, la fiesta del Happy Ending fue completa: buena música, comida, entrega y solidaridad.