JOSÉ BARRETO
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¿Qué expectativas para el show de octubre en Lima?
Hemos tocado en muchos países de Sudamérica y hemos sentido siempre una vibra asombrosa. Sabemos que será genial en el Perú porque recibimos muchos mensajes en nuestras redes sociales de ustedes.
Tardó mucho su llegada a nuestro país…
Todo lo bueno se hace esperar (risas)
¿Cómo es un día normal de Clown?
Todo el día estoy pensando en hacer cosas para la banda. Esto es lo que he venido a hacer a este mundo. No siento que sea trabajo. Yo soy Clown a diario.
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Los shows de Slipknot son intensos, ¿hay alguna preparación?
Todo es muy físico. Uno sabe que saldrá lastimado, pero no importa (risas). En general, voy al gimnasio, trato de comer bien, coordinamos todo con los técnicos de escenario pero, al final, solo nos queda respirar profundo y salir al ruedo a ver.
A pesar de los años, cada vez más gen- te joven los sigue…
La música es el gran tubo de escape de la sociedad. Hay mucha amargura y frustra ción entre los jóvenes y no es de extrañar que utilicen nuestra música para desahogarse.
Muchos puristas del metal sostienen que solo son populares por la propuesta visual…
Eso es basura. Lo que no soportan es que una banda de metal sude arte. No solo hacemos buena música, con buenas melodías y buenas letras, sino que también mostramos arte visual, máscaras y una gran ingeniería en el escenario. ¡Somos como un maldito Rolls Royce! Lo tenemos todo como banda.
¿Cuál creen que es la clave de su vigencia?
Ir por nuestros sueños. Todos los días hay idiotas que nos dicen que no podemos hacer algo, pero uno tiene que ser persistente. Hay que trabajar, sacrificar cosas, sufrir… todo eso implica ir por un sueño.