0 of 8
Cientos de fans esperaban la llegada del elenco de este último episodio de la serie titulada “Los Juegos del Hambre – Sinsajo Parte 2” del que también forman parte Donald Sutherland, Julianne Moore, Liam Hemsworth y Josh Hutcherson. Los actores caminarán por la alfombra roja del Sony Center de Potsdamer Platz en las primeras horas de la noche del miércoles.
PUBLICIDAD
Lawrence “es mi ídolo porque yo también quiero ser actriz”, declaró a la AFP Celeste Sopi, de 18 años.
En “Los Juegos del Hambre – Sinsajo Parte 2”, Katniss Everdeen, el personaje interpretado por Jennifer Lawrence, regresa para dar la última batalla contra el presidente Snow, que ha transformado el Capitolio en un campo de guerra y desea verla muerta a su vez.
Pero Katniss ya no es aquella inocente joven que los espectadores conocieron al principio, cuando se ofreció voluntaria para cubrir a su hermana Prim en los infames juegos del hambre.
La injusticia, la rabia, los golpes y las heridas del alma han convertido a esta especialista en el arco y las flechas en la heroína de la rebelión que quiere liberar a los distritos.
Jennifer Lawrence, a quien la apocalíptica saga basada en la trilogía homónima de la escritora estadounidense Suzanne Collins catapultó a la fama, se ha convertido en una de las pocas heroínas que ha dado Hollywood.
También se ha convertido, según la lista de 2015 de la revista Forbes, en la actriz mejor pagada del mundo, con unos 52 millones de dólares.
PUBLICIDAD
Jennifer Lawrence calificó al personaje que ella interpreta en la película de “fuerte, pero clemente”, al tiempo que Sutherland dijo esperar que la historia de la revolución dará a los jóvenes del turbulento mundo de hoy ganas de propiciar “un futuro digno”. “Esto no es más que el comienzo”, declaró.
“Verdaderos refugiados”
El director Francis Lawrence afirmó haberse inspirado de la arquitectura cargada de historia de Berlín, donde se filmaron numerosas escenas de la película.
“Parte de la sombría arquitectura que uno ve en la ciudad coincide perfectamente con la película”, explicó al periódico Berliner Morgenpost.
El aeropuerto berlinés de Tempelhof, un edificio típico del gigantismo arquitectónico nazi, se usó para representar el centro de poder totalitario de Panem, el mundo futurista de “Los Juegos del Hambre”.
El periódico Tagesspiegel destaca que el aeropuerto, cerrado en 2008, acoge actualmente a “verdaderos refugiados que huyeron de las bombas de un dictador que también era real”, estimando que esta ficción “muy actual” no es una “fábula futurista”.
Desde fines de octubre viven en este aeropuerto refugiados, como consecuencia de la falta de lugar para acogerlos en los centros de habituales, dada la cantidad de refugiados que han llegado a Alemania recientemente.