El guion de esta historia, toma como referencia el libro homónimo que escribió el escocés Irvine Welsh (1993). Una atmosfera que estuvo pensada desde el título, ‘Trainspotting’: hobby muy popular en el Reino Unido, que consiste en ver pasar los trenes de una estación mientras se apuntan las horas de llegada y salida. En otras palabras, una actividad inútil, como el hecho de pasar los días inyectándose heroína.
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La película de 1996, necesitó un presupuesto moderado de 3 millones y medio de dólares, según estima la web IMDb. En cambio, la situación de recaudación superó todas las expectativas que se pudieron trazar; alcanzó cifras superiores a los 16 millones de dólares.
Los protagonistas de esta historia fueron Ewan McGregor, Robert Carlyle, Jonny Lee Miller y Ewen Bremne. Precisamente, McGregor alcanzó fama mundial con su papel de Mark Renton, ganando el premio BAFTA a Mejor Actor Escocés.
Con relación a los personajes, Sick Boy (Jonny Lee Miller) vive obsesionado con Sean Connery y su papel de James Bond. Curiosamente, Lee Miller es nieto de Bernard Lee, actor que representaba a M en las películas del espía, hasta 1979.
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Como dato curioso, aparecen dos referencias a Taxi Driver (1976), cinta cumbre de Martin Scorsese. En la entrada al baño que había en el antro Volcano, el personaje de Ewan McGregor se encuentra con una imagen de Jodie Foster, actriz que apareció en la película de Scorsese; y Travis Bickle, personaje que interpretó Robert De Niro.
Los fanáticos de esta historia también recuerdan la banda sonora que acompañó el filme. En ella intervinieron músicos como Iggy Pop, Pulp, Lou Reed, New Order, Blur, David Bowie, Joy Division, entre otros grandes.
