Demostrando su fuerza, El Cigala ofreció un concierto en Los Angeles a pocas horas de que falleciera, víctima de un cáncer, su esposa y compañera de toda la vida.
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De esa manera, el cantautor homenajeó a su esposa, fallecida horas antes del recital, y con quien tiene dos hijos.
Visiblemente quebrado, el artista se presentó y dejó, según sus seguidores, más que el corazón en el escenario.
La esposa de El Cigala, según palabras del artista, fue el gran soporte en su carrera, por lo que su temprana desaparición ha constituido un golpe muy fuerte para la figura.