Por: José Barreto
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Hablar de Control Machete es referirse a un referente del hip hop latinoamericano. Parte medular de aquel fenómeno que se inició en México a mediados de los noventa fue Antonio ‘DJ Toy Selectah’ Hernández.
Con el capítulo de los Machete cerrado en el 2004, Selectah se abrió camino en la industria musical y no le ha ido nada mal: ha remezclado a artistas de la talla de Morrissey, Calle 13, Babasónicos, Gustavo Cerati y la banda indie estadounidense Vampire Weekend.
Toy estuvo en Lima la semana pasada para invitar a nuestros artistas a ser parte de una nueva edición del Red Bull Music Academy, iniciativa que esta vez tendrá lugar en Tokio y que desde hace 15 años recluta a músicos, DJ, cantantes y productores de todas las vertientes musicales para potenciar su talento.
¿Qué sonidos andas explorando por estos días? Me encuentro en un momento bastante interesante de mi carrera, pues estoy buscando muchos sonidos en varias latitudes. Desde la cumbia, la chicha, el rock, etc. Es un intento por lograr conectar a toda Latinoamérica desde sus propios sonidos.
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Has colaborado con varios artistas, ¿guardas de alguno un recuerdo especial? Definitivamente es muy difícil pensar en un solo artista. He pasado momentos muy gratos con los amigos de Calle 13 y Vampire Weekend, pero me emocionan proyectos que vi nacer y crecer, como 3BallMTY. Ahora acabo de colaborar en el proyecto de Juan Cirerol, cantante mexicano de música regional alternativa folk, y me encantó ser parte de ese equipo.
Eres bastante ecléctico, como el panorama musical actual, ¿hacia dónde sientes que se dirige la música? Creo que la música está viajando de manera natural a un lugar donde las líneas que dividen los géneros son cada vez más tenues. Vivimos una era ‘posgéneros’ inmersa en la tecnología, pero al mismo tiempo con la primaria y humana necesidad de conectar con las propias raíces.
¿Cómo percibes la música que se hace en el Perú? Perú siempre fue un centro energético. Desde aquí, en muchas épocas, se ha marcado la pauta. Hoy, Perú está por explotar musicalmente. Están viviendo una especie de ‘nueva ola’ de la música. Pero para que la explosión sea completa, además del circuito Lima-Arequipa-Trujillo que siempre ha existido, se debería consolidar otro más amplio que abarque a las muchísimas propuestas que están surgiendo.
