Las autoridades dijeron que tomaron la medida antes de que la diva de Barbados ingresara a la mezquita, abierta a quienes no son musulmanes y convertida en una importante atracción turística de la capital de Emiratos Árabes Unidos (EUA).
PUBLICIDAD
La artista de 25 años, que dio un concierto en Abu Dhabi el sábado, publicó las fotos en Instagram, el sitio web para compartir fotos en línea.
Rihanna llevaba un traje negro de pies a cabeza, pero tenía lápiz labial y esmalte de uñas rojo carmín. Aunque un pañuelo le cubría la cabeza, todas las poses para las fotografías podían considerarse sugerentes.
En una de las imágenes se la ve acostada de espaldas en el patio de la mezquita, mientras que en otra está sentada en el suelo con los brazos cruzados sobre el pecho.
En un comunicado publicado en su sitio web, la dirección de la Gran Mezquita señaló: “La cantante llegó en una visita privada sin presentarse y sin coordinación previa con la administración del centro”.
“Fue invitada a retirarse antes de entrar a la mezquita, después de posar de maneras que no coinciden con el carácter sagrado” del complejo, según el comunicado.
El centro dijo que busca asegurarse que ningún visitante “incumple los estándares de decencia necesarios para entrar en la mezquita, posar para fotografías inapropiadas o sentarse en posiciones no respetuosas”.
PUBLICIDAD
Las imágenes desataron la polémica entre seguidores de la cuenta Instagram de Rihanna.
“¡Piensa que está tomando el sol en una playa en Miami!”, señalaba un comentario escrito en árabe.
“Es culpa de quienes le permitieron acceder a la mezquita”, decía otro.
Pero algunos la elogiaron.
“Gracias por su respeto a nuestra religión… usted se tomó el tiempo para ponerse un vestido tradicional … Y las fotos son hermosas, no insultantes”, indicaba un comentario.
“Yo soy musulmán… y no lo encuentro una falta de respeto para nada. Te amo, Rihanna”, decía otro comentario.
Considerada una de las mezquitas más grandes del mundo, con una capacidad de 40.000 fieles, la Gran Mezquita Sheikh Zayed es un edificio de mármol blanco rodeado de estanques.
El complejo es uno de las principales atractivos turísticos de Abu Dhabi. En la sala de oración se encuentra la alfombra tejida a mano más grande del mundo.
