“The To Do List”, la última comedia no apta para menores que se estrena el viernes en Estados Unidos, cuenta el arduo proceso de iniciación sexual en la adolescencia, siguiendo la tradición de “American Pie” y “Superbad”, pero ahora es una chica quien complace a sus hormonas en una cinta generosa en bromas soeces.
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Libre de romanticismos casamenteros o representaciones idealizadas de la mujer, “The To Do List” (cuya traducción literal sería “la lista de cosas para hacer”) se estrena este viernes en Estados Unidos, aunque se desconoce aún su fecha de lanzamiento en Latinoamérica y España.
En la cinta ambientada en 1993, la actriz de 29 años Aubrey Plaza encarna a Brandy, una postadolescente que, después de graduarse con las mejores notas en el bachillerato, se da cuenta de que mientras ella estudiaba sus amigos descubrían el sexo.
La metódica Brandy decide resolver su ignorancia haciendo una (larga) lista de actividades sexuales que ha escuchado mencionar, desde la masturbación hasta el encuentro final, pasando por diversas manipulaciones orales y manuales.
Tras experimentar cada ítem, en explícitas escenas que parodian todo acto sexual, el objetivo de Brandy será perder su virginidad con el cosificado galán Rusty Waters (Scott Porter).
“Creo que tuve bastante éxito a la hora de convertir todas las escenas sexuales en algo increíblemente antisexy”, dijo, riendo, su directora y guionista Maggie Carey en una entrevista con la AFP.
“The To Do List” ha sumado buenas críticas, especialmente de las biblias de la industria Variety y The Hollywood Reporter, que elogiaron en particular la “vivaz” actuación de la estrella creciente Aubrey Plaza, una estadounidense de origen puertorriqueño mejor conocida como April en la serie “Parks & Recreation”.
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La mujer en la comedia
La cinta, que viene a complacer a los amantes de las comedias “clase R” (no aptas para menores de 17), tiene la necesaria cuota de bromas soeces, desnudos y chistes escatológicos para ponerse al lado de “American Pie”, aunque desde el inusual punto de vista de una mujer.
Luego de que las mujeres mostraran en 2011 con “Bridesmaids” que pueden hacer comedias subidas de tono, camino que siguieron este año Melissa McCarthy y Sandra Bullock con “The Heat”, “The To Do List” sube la apuesta al colocar a la mujer en el subgénero de la comedia sexual adolescente.
Carey afirma no obstante no haber pretendido hacer una declaración de independencia.
“Cuando uno es adolescente, es muy curioso sobre el sexo y es muy natural querer contar esta historia”, explicó la directora. “Yo no tenía una agenda. Pero definitivamente uno no ve el punto de vista femenino muy a menudo en el género de las comedias sexuales adolescentes”.
Con un costo de apenas 1,2 millones de dólares (cifra modesta para los estándares de Hollywood), “The To Do List” es el primer largometraje de Carey, quien afirma haber querido contar una historia “honesta” que sus compañeras de secundaria habrían querido ver.
Según la autora, los momentos más crudos de la película semi-autobiográfica provienen de esa honestidad.
“Quería que reflejara la forma como mis amigas y yo hablábamos entre nosotras cuando estábamos en secundaria, y creo que fui bastante franca”, dijo Carey.
“Cuando uno experimenta por primera vez esta clase de cosas no desde el punto de vista del chico, sino de la mujer que es quien está realizando la acción”, explicó, refiriéndose a una escena de sexo oral, “pues es bastante chocante. No es exactamente sexy”.
Situar la cinta a principios de los años 90 también dio a la autora numerosos espacios para la comicidad, desde el ridiculizado vestuario hasta algunas referencias al recién llegado internet.
La ambientación “es un complemento simpático para el carácter de Brandy. (…) Ahora los chicos son más perspicaces y sofisticados y pueden googlear un montón de cosas”, dijo Carey. Pero una chica de un poblado remoto “no tenía acceso a esta información”.
En última instancia, sugiere la directora, “The To Do List” pone en evidencia, para información sobre todo de los adolescentes de hoy en día, cómo ha cambiado en veinte años la experiencia del despertar sexual.
