Un comercial de la actriz Pamela Anderson para la web Crazy Domains fue censurado en el Reino Unido por ser “sexista y degradante para las mujeres”.
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Según The Guardian, las escenas fueron denunciadas ante el Advertising Standards Authority, supervisor británico de contenido publicitario, que decidió vetarlo por las recurrentes escenas erótica.
La compañía Dreamscape Networks, propietaria de Crazy Domains, considera que el hombre que fantasea a Anderson y a su asistente en una reunión de negocios es presentado como una persona inestable, mientras que las dos mujeres eran “atractivas y dinámicas”.
El video tiene más de 180 mil reproducciones en YouTube.
