Asistir a los premios Oscar y pasar por la alfombra roja entre decenas de flashes ameritan una enorme inversión. Al menos, así lo entendió Adele.
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En su debut en este evento, la cantante británica invirtió casi un millón de dólares en su look. Según el diario Daily Mail, el gasto más grande de la autora de Someone Like You fueron sus aretes de diamantes, diseñados por Harry Winston. Le costaron 906.477 dólares.
Asimismo, pagó 22.600 dólares por la asesoría del estilista Gaelle Paul para su vestuario. En su vestido, diseñado por Jenny Packham, desembolsó un total de 5.287 dólares. A eso hay que sumar el traje Burberry con el que cantó cuando subió al escenario. Este costó 7.554 dólares.
En sus dos pares de zapatos, de la exclusiva marca Christian Louboutin, invirtió 6.554 dólares.
Entre uñas y cuidado de la piel, debió haber gastado unos 4.781 dólares, según la publicación. En el peinado, 863 dólares, y en el maquillaje, unos 225 dólares.
