Lulú, una norteamericana de 27 años y que pesa más de 100 kilos, no tuvo complejos para presentarse en el programa de talentos America’s Got Talent y presentar su rutina de “baile del caño”.
Pese a que no había mucha fe en su actuación y que el jurado no le permitió clasificar a la siguiente ronda, Lulú se conformó con el aplauso de la gente y fue uno de los comentarios centrales en las redes sociales estadounidenses.