Tal disciplina en el ahorro tiene al representante de la cantante tan extrañado, que incluso le ha llegado a preguntar si ha perdido sus tarjetas de crédito.
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“Yo no me metí en este negocio por el dinero, y soy feliz sin derrocharlo. Obviamente, no estoy en bancarrota, pero es que no me gusta gastar dinero en cosas que no necesito. Es gracioso, la verdad, porque mi mánager no deja de llamarme preocupado para ver si he perdido las tarjetas de crédito o si las he cancelado. ‘¿Por qué no gastas nada de dinero?’, me pregunta. ‘Porque no quiero, no me he vuelto loca’, le contesto yo siempre”, reveló Gaga en una entrevista en la televisión estadounidense.
De hecho, la estrella continúa viviendo en el mismo apartamento de Nueva York en el que residía antes de convertirse en una superestrella. Y aunque en el futuro próximo podría mudarse a una casa más grande y lujosa con su pareja, el actor Taylor Kinney, la artista reconoce sentirse cómoda en su íntimo y acogedor espacio.
“Llevo viviendo más de seis años en el mismo apartamento y no llevo nada mal el dormir en una pequeña cama a cuatro pasos de la cocina”, confesó.
Por otro lado, algunas amistades cercanas a la diva comentaron que Gaga estaría obsesionada por formalizar su relación con Taylor y que querría convertirse en madre tan pronto termine su gira mundial. La intérprete estaría tan enamorada de su novio que ya se ve compartiendo el resto de su vida junto a él.
