1.- Mel Gibson y Robyn Moore: El actor tuvo que desembolzar 1.000 millones de dólares a la madre de sus 7 hijos tras 31 años de matrimonio. Es el divorcio más caro de Hollywood.
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2.- Michael Jordan y Juanita Jordan: Juanita recibió nada más y nada menos que la jugosa suma de 168 millones de dólares.
3.- Madonna y Guy Richie: Para la reina del Pop no le fue nada barato separarse de Richie. La gracia le costó entre 76 y 92 millones de dólares.
4.- Harrison Ford y Melissa Mathinson: Tras 21 años de matrimonio, el actor tuvo que recompensar a Melissa Mathison con 85 millones de dólares
5.- James Cameron y Linda Hamilton: Cameron tuvo que pagar 50 millones para poder romper los lazos matrimoniales.
6.- Paul McCartney y Heather Mills: Solo con 48,6 millones, la pareja del ex Beatle se mostró satisfecha.
7.- Phil Collins y Orianne Cevey: El baterista cedió 30 millones para poder ‘liberarse’ de Orianne, su tercera esposa.
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8.- Michael Douglas y Diandra: el actor recompensó a su ex esposa con 45 millones para poder rearmar su vida junto a su colega Catherine Zeta Jones
9.- Ashton Kutcher y Demi Moore: La actriz sufrió daños emocionales y no materiales tras el divorcio con el actor Ashtor Kutcher. Tras la dolorosa ruptura, la intérprete fue ingresada en una clínica de rehabilitación, donde la atendieron psiquiatras.
10.- Russell Brand y Katy Perry: estuvieron casados durante un año y se divorciaron el pasado febrero. Brand alegó diferencias irreconciliables y, actuando como un caballero, no reclamó la separación de bienes, pues la fortuna de Perry supera la suya tres veces.
11.- Maria Shriver solicitó el divorcio a Arnold Schwarzenegger la primavera pasada tras salir a la luz la información sobre su hijo ilegítimo que el actor tuvo con una empleada de hogar. Primero, Shriver amenazó con reclamar la mitad de la fortuna de ‘Terminator’, pero después pidió más tiempo para pensárselo.
12.- La pareja que formaban Heidi Klum y Seal parecía perfecta, pero hace poco la modelo solicitó el divorcio al cantante británico. Klum también quiere tener la custodia primaria de sus cuatro hijos, con la que Seal tendría sólo derecho a visitas.
