Hugh Jackman vuelve a la pantalla grande con Gigantes de acero, una película en la que saca a relucir sus dotes para el boxeo.
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En la cinta, que se estrena hoy en cines limeños, el mundo de los boxeadores humanos se transforma cuando enormes robots se apoderan de los rings. Charlie, un peleador frustrado, se ve obligado a trabajar como promotor y entrenador de robots de mala muerte. Poco a poco, su difícil vida se va transformando por completo.
Para esta película, los protagonistas contaron con la ayuda de la leyenda del box, Sugar Ray Leonard, quien los entrenó y les enseñó los principales movimientos sobre el ring. ‘A Hugh le enseñé que todo es cuestión de confianza. Para golpear con convicción, tienes que golpear con confianza’, dijo el ex campeón mundial.
Lo que más atrajo a Hugh Jackman de esta producción fue la visión que presenta. ‘Está ambientada en un futuro que parece accesible a nosotros. Además, la historia es muy positiva e inspiradora; el protagonista lucha contra todo para poder triunfar’, cuenta el actor australiano, que ganó fama mundial por su participación en la saga de los X?Men, haciendo el papel de Wolverine.