Australia clasifica a su cuarto Mundial consecutivo, que no ha llegado más allá de los octavos de final, y que en este proceso tomó la decisión de competir con equipos asiáticos y ya no con los oceánicos.
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Su líder es Tim Cahill, quien es el máximo goleador de la historia de su selección y el segundo futbolista con más partidos (104, solo 5 menos que el portero Mark Schwarzer), pero lo cierto es que a sus 37 años ya no es ese atacante que en algún momento debía ser resguardado minuciosamente por cualquier bloque defensivo.
Quizá su futbolista a considerar más es el portero Matt Ryan, que en estos momentos ataja en el Brighton & Hove Albion de la Premier League.
Lo más curioso de este combinado es que, a diferencia de los otros, no tiene entrenador.
El griego Ange Postocoglu había dirigido al equipo oceánico durante los últimos cuatro años, e incluso durante el Mundial de Brasil 2014, pero renunció a su cargo.
